Seguimiento a Coutinho: de más a menos y bien por la derecha
Sufrió cuando el Barça perdió la pelota en la segunda parte. Empezó en una banda y se cambió a la otra cuando Iniesta tuvo que ser sustituido.
Philippe Coutinho fue el elegido. Hacía días que lo meditaba, pero lo pensó y lo repensó durante casi una semana. Hasta última hora persistieron las dudas, pero el entrenador declinó darle la oportunidad a Ousmane Dembélé, que era el plan B y se decidió por el brasileño. Ni Paulinho ni André Gomes tuvieron papeletas, aunque al final estos dos acabaron en el césped y Coutinho, en el banquillo al lado del francés.
Fue bueno el choque de Coutinho. Se le notó que debe acabar de perfilar y mover bien los hilos con Messi y Sergi Roberto, aunque fue Rakitic el que venía a limpiarle la zona cuando parecía embarrada. El fichaje más caro de la historia del Barça tuvo apariciones interesantes desde la derecha, aunque cuando Iniesta recibió un primer golpe tras una caída, y luego Vrsaljko acabó por rematarlo (el capitán se fue con una lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna derecha), supo que debería cambiar de costado.
Mientras el Barça tuvo el control de la pelota, Coutinho tuvo participación. Remató a portería y acarició el gol en la primera parte (23’), aunque el balón le quedó muy alto para golpearlo. Hizo diagonales interesantes (22’), combinó en corto con Messi y en largo con. Alba y Busquets, además de probar fortuna en acciones individuales que acabaron con la aprobación del Camp Nou.
En el 36’ Oblak le impidió anotar y en los compases finales de la primera parte, trató de probar un caño a Filipe Luis. No le salió bien. Tuvo que correr muchos metros para recuperar, pero el esfuerzo valió la pena, ganó la pelota y fue ovacionado por el Camp Nou antes de irse al descanso.
Con la pelota en los pies de los jugadores atléticos en la segunda parte, mucho correr y poco aparecer. Sufría el Barça y lo hacía Coutinho, que poco a poco fue va aprendiendo que en el Barça, además de acariciar la pelota se debe morder para recuperar la posesión. En el 78’ le ganó una partida y una carrera a Correa, en el 79’ cayó en el área tras un encontronazo (no fue penalti) con Saúl antes de irse en el 83’ al banquillo a sufrir por tres puntos que pueden ser claves en LaLiga.
