El central Vukasin Jovanovic aterriza en el Eibar
Se une a Orellana y Pape Diop, que se han adaptado en tiempo récord al equipo. Por su parte, Bebé regresará en calidad de cedido al Rayo.
El internacional sub-20 por Serbia Vukasin Jovanovic va camino de ser la última de las incorporaciones del Eibar en esta ventana de fichajes invernal. Se trataría del defensa central tras el que el club ha estado estas últimas semanas para apuntalar la zaga. Ya ha pasado reconocimiento médico y su cesión será anunciada en breve.
Proveniente del Girondins de Bourdeaux, el defensor ha disputado 1.440 minutos, divididos en 16 encuentros de la Ligue 1. Sin embargo, una lesión de rodilla el pasado mes de diciembre, lo ha mantenido apartado de los terrenos de juego desde entonces. Su último encuentro disputado data de del 17 de diciembre del 2017, donde su equipo cayó derrotado ante el Niza por 1-0.
Anunciaba Mendilibar hace dos semanas que la incorporación de un defensor podría producirse, pero con una visión de futuro que no se limitara únicamente a la campaña actual. Parece que el club lo tiene claro, y solo queda la firma para que esto se haga realidad.
Thiago Bebe, cedido al Rayo Vallecano
Por su parte, el atacante de Cabo Verde Thiago Bebe será la última de las salidas que el conjunto armero sufra esta ventana de fichajes invernales. Esta mañana se confirmaba la noticia: Bebé regresará en calidad de cedido al Rayo Vallecano hasta final de temporada. El jugador no ha entrenado con sus compañeros el día de hoy, lo cual ha levantado todas las alarmas entre los asistentes al entrenamiento.
Los fichajes invernales ya brillan
Si la SD Eibar ha destacado en algo los últimos años, ha sido en la brillante labor de su dirección deportiva a las órdenes de Fran Garagarza. El trabajo realizado por el club, contratando a jugadores no tan conocidos en el ámbito mundial por un precio asequible para transformarlos en jugadores de primer nivel, ha dado sus frutos durante las cuatro temporadas del club en primera división. Takashi Inui, Sergi Enrich, Keko Gontán, Gonzalo Escalante, Jota Peleteiro o Florian Lejeune son ejemplo de ello.
Sin embargo, la propuesta del departamento de Garagarza para esta ventana de fichajes ha sido la de firmar incorporaciones de rendimiento inmediato. Jugadores con experiencia en el máximo nivel de competición que dotaran al vestuario de un salto de calidad y sirvieran como motor interno de motivación. Dicho y hecho.
Tras tres jornadas disputadas en 2018, tanto Orellana como Diop disfrutaron de la titularidad en San Mamés ante el Athletic.
Fabián Orellana, calidad técnica y gol
El campeón de la copa américa aterrizó en el mes de diciembre proveniente del Valencia en forma de cesión. Su capacidad de jugar por dentro, sus regates y su calidad técnica ya han salido a relucir en los cuatro partidos que ha podido disputar.
Con su inmejorable debut ante Las Palmas, donde perforó la portería rival en el primer balón que tocó, la afición armera pudo ver lo que le espera al equipo con el atacante chileno. El extremo se encuentra cómodo tanto en su posición, como con el resto de compañeros, y su objetivo es demostrar de qué es capaz con un balón entre las piernas.
Ante el Athletic fue uno de los jugadores más peligrosos del Eibar, tratando de encontrar continuamente huecos por los que hacer daño y desesperando a los defensas rivales.
Pape Diop, creación y pausa
El franco-senegalés llegó en enero, libre, procedente del Espanyol. Sus 12 años en las máximas categorías del fútbol profesional hacen de él un jugador de garantías. Así lo ha venido demostrando en los últimos encuentros disputados, donde le ha dado al centro del campo la pausa y el control que ha hecho falta en algunos momentos.
Estrenó titularidad ante el Athletic, siendo junto a Orellana uno de los jugadores que mejor papel hizo sobre el terreno de juego. Siendo consciente de la dificultad de quitarles la titularidad a jugadores como Dani García o Jordán, hasta ahora indiscutibles en el once de Mendilibar, el centrocampista no va por mal camino para lograrlo. Se le ve feliz, a gusto y compenetrado con sus compañeros en menos de un mes en Eibar.