De un año a otro, el Madrid pierde un gol por partido
El Real Madrid ha pasado del récord de 73 partidos marcando a sufrir para hacer gol, su condena en esta Liga. Cristiano necesita chutar cuatro veces más que en la Champions...
En la triunfal temporada pasada al Madrid se le caían los goles de los bolsillos. En esta, conseguirlos en Liga es casi un suplicio. De un promedio de 2,78 goles por jornada en la 2016-17 a 1,77 en la actual. Un gol menos. Con ese tanto extra, el Madrid sólo habría perdido un partido en esta Liga, el Clásico del 23 de diciembre...
El Madrid no encuentra el gancho al hígado. Un equipo que logró un récord de 73 partidos consecutivos marcando y que ahora, de los últimos 25, en cinco de ellos (incluído el de ayer) se quedó a verlas venir. No pudo batir a Adán (Betis, 0-1), Oblak (Atlético, 0-0), Kepa (Athletic, 0-0), Ter Stegen (Barça, 0-3) y Asenjo (Villarreal, 0-1). Del bazooka al tirachinas. Cristiano habló en noviembre de las salidas en verano (“Morata, James y Pepe nos hacían más fuertes”) y eso creó un cisma con Sergio Ramos, pero que el Madrid echa en falta los goles de Morata no es ya una simple sensación. A estas alturas de la pasada Liga, el nueve español sumaba cinco dianas, que el Madrid había canjeado por seis puntos. En esta temporada, ningún madridista pasa de cuatro tantos ligueros: Cristiano, Bale y Asensio. El astro es el ejemplo vivo del atasco doméstico. Ofuscado, necesita 18 remates para hacer un gol. Cuatro veces más de los que invierte en Champions (4,4)...
“No quiere entrar, no nos merecemos este palo...”, resumía Zidane, en caliente, tras el 0-1. A Zizou le enfada el debate sobre el mal momento de su Madrid, pero es que se le acumulan los datos negativos. El equipo blanco no enlazaba dos jornadas seguidas sin gol al calor del Bernabéu desde 2007. Para encontrar dos derrotas seguidas hay que echar aún más hacia atrás las páginas del calendario, hasta mayo de 2000, cuando perdió contra Alavés y Valladolid, ambos por 0-1.
Protagonistas de un bajón.
Al Madrid no le sale nada a un mes vista del PSG y hay pesos pesados desquiciados. Marcelo, pitado ayer, está en un agujero negro. De sus 16 centros contra el Villarreal, 13 ni siquiera pudieron ser rematados. Su peor cifra desde que está en el Madrid. A eso le sumó su pasividad defensiva, crónica esta campaña, en el gol de Fornals. A falta de 20 jornadas de Liga al Madrid sólo le queda algo impensable en agosto, vigilar que no le releguen al quinto puesto. Mirando la Copa del Rey de soslayo, la Decimotercera es el gran asidero. Todo o nada.