Kepa Arrizabalaga sigue en candelero. El Real Madrid acecha y sigue sin renovar con el Athletic, que todavía alberga esperanzas. En medio, un derbi ante la Real con Kepa bajo palos. Interrogado por si se trata de su último derbi, contestaba: “No lo creo” ante las cámaras de ETB, encogiéndose de hombros.
“Es una buena oportunidad de adelantarnos en la clasificación, darle la vuelta a nuestra situación y de estar tranquilos en las Navidades”, lanzó sobre el envite del sábado ante la Real, motivado el arquero por pasar como primero a la fase final de la Europa League y vencer al Levante en Liga: “Hemos recuperado esas sensaciones que no teníamos los años anteriores”
En su pueblo, Ondarroa, vacilan a Iñigo Martínez, central de la Real y al propio Kepa: “Para el pueblo es bonito, las bromas durante la semana los comentarios”. Sobre si ambos podrían en el futuro jugar juntos como vecinos y amigos, responde el arquero que “sería bonito pero viniendo él (al Athletic)”. Iñigo incluso se arranca deslizando que “el destino es así, le diría presi afloja un poco y tráele”, señala el central. “Es muy difícil ir del Athletic a la Real o de la Real al Athletic”, remata. Kepa pronostica un 2-0. “Jugamos en casa y es un factor y la baza de escalar en la clasificación y acercarnos a la Real”, reitera.
