El fantasista franco-argelino Ryad Boudebouz vive en el Betis su primera aventura futbolística fuera de España y lo hace con las dudas del novato y el hándicap de haber llegado lesionado de una rodilla. Le está costando entrar en las alineaciones titulares aunque ya ha dejado algunos detalles de calidad y este domingo tiene sus opciones de volver al once de Quique Setién, que busca futbolistas que estimulen la creatividad y la reacción de su equipo, que no ya ganado en las últimas cinco jornadas de Liga y quedó lastimosamente apeado en Copa por el Cádiz.
Ryad ha actuado en 10 partidos y ha marcado dos goles, uno de ellos al equipo amarillo. Hace unos meses, cuando brillaba como uno de los grandes creadores de Europa en el Montpellier con 11 goles y 10 asistencias, media Europa había puesto sus ojos en él. Entre los interesados, publicó Le Buteur de Argelia, estaban el Atlético y el Sevilla. Y Boudebouz se dejaba querer: "Quiero probar en otros campeonatos y todo el mundo me dice que vaya a España. Tengo ganas de probar".
Finalmente, se marchó al Sur (aunque a Heliópolis, no a Nervión) a cambio de siete millones de euros, precio que fue considerado por muchos especialistas como una ganga. De momento Ryad no arranca, aunque se sigue esperando mucho de él. Ante el Atlético, que le tuvo en su agenda, tiene otra ocasión de mostrar su calidad entre líneas.