Ganan el 66% de de los partidos ante los recién ascendidos
El Espanyol, desde que juega en Cornellà, ha vencido 16 de los 24 partidos que ha diputado como local ante los equipos recién ascendidos.
Los equipos recién ascendidos suelen tener, como es lógico, un nivel relativamente inferior a los de Primera por el simple hecho de que vienen de una categoría inferior. Una realidad que conoce bien el Espanyol, que desde que juega sus partidos en Cornellà tiene un balance más que positivo con los equipos recién ascendidos: 16 victorias, cuatro empates y cuatro derrotas (66% de victorias). Hoy ante el Levante esperan seguir mejorando el balance.
La dinámica, además, ha empeorado en las últimas temporadas, ya que en las primeras fue excelsa. En las cuatro temporadas iniciales de Cornellà, con Pochettino y Aguirre en el banquillo blanquiazul, el equipo tan solo perdió un partido contra los conjuntos que venían de Segunda: ante el Villarreal y con el mexicano en el banquillo. Por otra parte, venció a equipos de la talla de la Real Sociedad o el Betis y goleó a rivales como el Rayo o el Hércules.
Fue con Sergio González (y con Constantin Galca) cuando la dinámica se empezó a romper: en seis partidos sumaron tres dorrotas (ante Sporting, Betis y Eibar) mientras que el equipo solo logró ganar a Córdoba y Las Palmas. Fueron, de hecho, los peores años recientes del Espanyol, que acabaron con Quique Sánchez Flores en el banquillo. Precisamente fue con el entrenador madrileño cuando la tendencia volvió a revertirse y asimilarse a la de los primeros tiempos de Cornellà: el curso pasado, ante los tres recién ascendidos, tres victorias y ningún gol en contra: 1-0 al Alavés, 3-0 a Osasuna y 3-0 al Leganés.