La leyenda Xabi Prieto amenaza esta tarde al Submarino Amarillo
Xabi Prieto entra en la historia de la Real por que hoy (20:15 beINSports) contra el Villarreal jugará su partido 500 con la elástica txuri-urdin.
Xabi Prieto entra hoy en la historia de la Real. Porque contra el Villarreal jugará su partido 500 con la elástica txuri-urdin, convirtiéndose en el quinto realista en conseguir tal hazaña, tras mitos como Gorriz, Larrañaga, Zamora y Arconada. Son palabras mayores, y Anoeta se lo reconocerá con una ovación promovida por los aficionados a través de las redes sociales en el minuto 10, su número eterno. El gran capitán se convierte en leyenda y amenaza con hundir a un Submarino Amarillo que no puede permitirse otro tropiezo después de su inesperada derrota contra el Levante en la primera jornada.
Esta es, sin duda, la tarjeta de presentación de un partido con sabor europeo, entre dos rivales llamados a pelear por las posiciones de privilegio, y que se convirtió en una clásico la pasada temporada (sugue el encuentro en directo en AS.com). Hasta cuatro veces se vieron las caras amarillos y txuri-urdin. Demasiadas para no conocerse al dedillo. Y está campaña mucho no puede cambiar, porque poco han cambiado ambos equipos en el mercado de fichajes. Pequeños retoques que, si cabe, hacen más completas y competitivas sus plantillas. Aunque de momento destacan los de siempre. En la Real Januzaj sigue sin poder debutar en la Liga. A pesar de estar ya con el grupo, recuperado de su lesión, Eusebio ha decidido no arriesgar al dejarlo fuera de la lista de nuevo y esperar al parón liguero para que esté al 100%. Y Diego Llorente no jugó en Vigo. Fueron los Oyarzabal, Juanmi, Vela y Willian José los que salieron para desatascar la situación y darle el primer triunfo de la temporada a los donostiarras. Un buen triunfo, viendo las escasez de juego mostrada, pero que sirve para dar confianza al ambicioso proyecto de Eusebio.
El Villarreal no está para bromas. Asediado por las bajas (tiene hasta siete), con una pretemporada condicionada por la enfermería, necesita sumar tres puntos que tapen la herida inesperada abierta en el Ciutat de Valencia, donde no ofreció la versión de un equipo que quiere luchar por Europa. Debe despertar, y enfrente tendrá al mejor rival para hacerlo, una Real ante la que no pierde en los últimos 15 años, casualmente los años que los donostiarras llevan sin poder ganar los dos primeros partidos de Liga. Hay que remontarse a la temporada del último subcampeonato para ver algo así. Aunque los que deben aparecer son los refuerzos: Unal, Fornals, y sobre todo, Bacca, su fichaje estrella. Seguro que ayuda la recuperación de Castillejo y Bakambu.
