Jesús Navas, Torres, Joaquín... los regresos de los hijos pródigos
El extremo ha firmado con el Sevilla tras salir del club en 2013. Otros ejemplos en los últimos años fueron Reyes, Valerón, Cani, Michu...
El regreso de Jesús Navas al Sevilla tras finalizar su contrato con el Manchester City se produce cuatro cursos después de su salida y ya en plena madurez futbolística superando la treintena pero con aspiraciones de luchar para hacerse con el puesto de titular. Pese a recibir múltiples ofertas, el extremo ha decidido volver a casa, un proceso que han llevado a cabo varios jugadores en los últimos años siendo recibidos como mitos por la afición tras haber salido de la cantera para probar suerte fuera. Aunque no puedan lucir el mejor nivel de su carrera, son futbolistas respetados en LaLiga por sus trayectorias futbolisticas.
Fernando Torres es el mejor ejemplo de ello. El Niño volvió al Atlético en enero de 2015 llenando el Vicente Calderón en su presentación, siete años y medio después de salir. Sus primeros goles en su segunda etapa fueron contra el Real Madrid con un doblete en Copa del Rey. Torres se puso el mono de trabajo, consciente de que con 31 años no llegaba como titular. Terminó la temporada con 6 goles en 26 duelos. El curso siguiente se hizo con un hueco en el once pese a los fichajes de Jackson y Vietto y marcó 12 goles en 44 partidos. La pasada campaña hizo 10 tantos antes de renovar por un curso su contrato, dos de ellos en la despedida del feudo rojiblanco contra el Athletic. Torres se ha erigido como uno de los emblemas del club y quiere estrenar el Wanda Metropolitano con la posibilidad de luchar por entrar en el top-5 de goleadores de la historia del equipo. El Niño es sexto con 119 tantos, a seis de los 125 de Peiró y a 16 de Gárate, que ocupa la cuarta posición.
Joaquín también vivió el cariño de su afición en el regreso al Betis nueve años después de haber dicho adiós. El extremo volvió con 34 años al club en el que se crió saliendo de Italia tras pasar dos temporadas en la Fiorentina. Decidió volver a España para vestir la camiseta verdiblanca donde porta el brazalete de capitán. Con 36 años es uno de los futbolistas más veteranos de la competición y el curso pasado disputó 28 partidos de Liga en los que marcó 3 goles. Con menor capacidad para el desborde, perdiendo velocidad con el paso de las temporadas, se ha reciclado para una versión más centrada y participando más en la elaboración del juego.
Antes de que Jesús Navas diese el paso de volver a vestir la camiseta del Sevilla, José Antonio Reyes vivió un proceso similar. El extremo había salido del club andaluz en enero de 2004 para firmar con el Arsenal donde se hizo un nombre en la Premier League. Tras salir del club inglés cedido al Real Madrid y después fichar por el Atlético, donde tuvo un mal inicio jugando en el Benfica cedido por un curso y recuperando su mejor versión en el regreso, Reyes firmó por el Sevilla de nuevo en enero de 2012 cuando tenía 28 años aceptando reducir su salario a la mitad. Jugó 157 partidos en los cuatro cursos y medio de su segunda etapa sevillista marcando 16 goles antes de firmar por el Espanyol.
Uno de los mitos del fútbol español que se retiró recientemente fue Juan Carlos Valerón. El mediapunta canario regresó a Las Palmas con 38 años para demostrar que su clase no necesitaba de físico para lucir. 17 años después de salir de la isla y brillar en sus 13 cursos en el Deportivo, disputó 91 partidos y marcó tres goles con Las Palmas antes de colgar las botas en 2016 con 40 años para pasar a formar parte del cuerpo técnico del equipo pio pio.
Otros dos futbolistas que han concluido su carrera deportiva en este caso hace tan solo un mes son Cani y Michu. El centrocampista regresó al Zaragoza con 34 años para jugar sus últimos 32 partidos con el club maño y marcar su último gol. Había salido 11 años antes del equipo para hacer carrera en el Villarreal (ocho temporadas y media) y pasar fugazmente por el Atlético y por el Deportivo. Por su parte Michu ha decidido decir adiós al fútbol con tan solo 31 años por los múltiples problemas físicos sufridos en los últimos años, centrado en las lesiones de tobillo. El delantero regresó al Oviedo 10 años después de haber puesto rumbo al Celta y haber destacado en la Premier League en su primera temporada en el Swansea en la que marcó 22 goles.