NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

FÚTBOL

¿Qué fue de Gravesen?: de ‘ogro’ a millonario en Las Vegas

El excentrocampista del Real Madrid causó sensación en nuestro país por su peculiar forma de ser que le costó más de una polémica y por su famosa ‘gravesinha'

Gravesen grita durante un Real Madrid-Sevilla de LaLiga 05/06.
Gravesen grita durante un Real Madrid-Sevilla de LaLiga 05/06. JESUS AGUILERADIARIO AS
AStv

Patentar un regate casi de forma involuntaria es algo de lo que pocos jugadores pueden presumir. Y más aún si hablamos de una de las fintas más extrañas de la historia del fútbol: la 'gravesinha'. Tan estrafalaria como su creador Thomas Gravesen, se presenta como uno de los amagos más bruscos que se recuerdan. En la jugada, el danés clavaba su rodilla en el suelo poniendo en peligro ligamentos, rótula… Pero, las rodillas de Gravesen eran tan o más duras que él.

El excentrocampista del Real Madrid es muy recordado por su intensidad en el juego, en el que destacaban algunas entradas pasadas de vuelta y su fuerte carácter. Tras tener que colgar las botas antes de tiempo por no encontrar equipo, el danés supo gestionar sus ganancias como futbolista para aumentar su fortuna de la que disfruta a día de hoy.

Thomas Gravesen (Velje, Dinamarca, 11 de marzo de 1976) debutó como futbolista profesional en el Velje en 1995. Durante dos años jugó en el equipo de su ciudad natal hasta fichar por el Hamburgo, donde estuvo durante tres temporadas. Fue en su paso por la liga alemana donde empezó a llamar la atención recibiendo la llamada de uno de los grandes de la Premier League, el Everton.

Gravesen grita durante un partido contra el Everton.
Ampliar
Gravesen grita durante un partido contra el Everton.STEVE PARKINAFP

En el equipo de Liverpool destacó por lo que los ingleses llaman ‘box to box’, un jugador de área a área, capaz de recuperar en su campo y conducir el balón al área rival. Un ‘todocampista' como diríamos en España. Esta condición le sirvió para que Arrigo Sacchi, entonces director deportivo del Real Madrid, concretase su fichaje por el club blanco, que necesitaba cubrir la posición de centrocampista defensivo tras la marcha de Makelele.

El danés llegaba a España para cubrir las espaldas de los galácticos en el cuadro merengue que pagó por él en torno a 3,5 millones de euros en el mercado invernal del 2005. El centrocampista también venía de hacer una buena Eurocopa con su selección, con la que llegó a disputar un total de 66 partidos a lo largo de su carrera, marcando cinco goles.

Lo cierto es que Gravesen no era el centrocampista defensivo que buscaba el Madrid de Zidane, Figo, Ronaldo, Raúl…y pronto se empezó a notar en sus duras faltas y en su intensidad en el juego, lo que le hizo ganarse la fama de duro. El ‘ogro’ o ‘Shrek’ de los galácticos le llamaban.

Ampliar

A pesar de no destacar por su buen juego o gran aportación al equipo, Gravesen caló hondo en el club blanco. Su fuerte carácter y extraña forma de comportarse en el campo fueron protagonistas en muchos programas deportivos durante su estancia en Madrid, donde se popularizó la ya comentada ‘gravesinha’. El mediocentro pasó más tiempo lesionado que jugando, ya que su postura de naturista le impedía tomar medicamentos. El danés era sin duda un personaje sin cuidado.

Su salida del Real Madrid no estuvo exenta de polémica. Una pelea con Robinho en la pretemporada de la 06-07 firmó su sentencia como madridista. Tras el incidente en un entrenamiento, Fabio Capello le puso la cruz y ese mismo verano fue traspasado al Celtic de Glasgow para un año más tarde regresar en calidad de cedido al Everton por una temporada. Se convertía entonces en uno de los peores fichajes de la historia del Madrid que dirigía Florentino en su primera etapa como presidente blanco.

Ampliar

En 2009, tras varios meses sin encontrar equipo decide retirarse con 32 años. Colgó las botas pronto, pero el exmadridista sabía lo que hacía. Según el diario danés BT, invirtió el dinero que había ganado como futbolista en varios negocios que le permitieron multiplicar su dinero, alcanzando una fortuna superior a los 100 millones que le permitieron anunciar su segunda retirada a los 37 años. Fue entonces cuando se marchó a Las Vegas.

Gravesen celebra un gol con varios compañeros del Celtic.
Ampliar
Gravesen celebra un gol con varios compañeros del Celtic.DAVID MOIRREUTERS

Lo último que se sabe del danés es que se pasa los días jugando al póker, al blackjack… en los mejores casinos de la ‘ciudad del pecado’ donde vive con su última pareja, la modelo Kamila Persse. Un retiro dorado que no podía protagonizar otro. Más de una década después, el ‘ogro’ de los galácticos sigue dando la ‘nota’ allá donde va. Una vida de desenfreno que en su paso por España nos dejó algunas joyitas que jamás olvidaremos.