De la Bombonera a Albacete

Andrea Ojeda (17/1/1985) ha cambiado la Bombonera por la Ciudad Deportiva y el Carlos Belmonte de Albacete. Esta futbolista argentina de 32 años lleva poco más de dos meses en tierras manchegas, tras llegar como último fichaje del Fundación Albacete con más de 400 goles marcados, con el cartel debajo del brazo de máxima goleadora histórica de Boca Juniors y siendo internacional con la selección argentina absoluta.

Apenas ha podido disfrutar de poco más de 30 minutos en la Liga Iberdrola debido a molestias en el nervio ciático, lo que ha provocado que todavía no haya podido conseguir ningún tanto, aunque sabe que las delanteras viven del gol “Es cuestión de rachas, pero ahora me encuentro mejor y tengo muchas ganas de marcar un gol”, asegura tomando mate, la tradicional infusión de Sudamérica junto al monumento del cuchillero en la Plaza del Altozano de Albacete, un sector emblemático de la ciudad.

Quedan dos jornadas para el final de campeonato y su equipo ocupa el penúltimo puesto de la clasificación, a un solo punto de la permanencia y este domingo reciben al colista, en un partido clave para el devenir del equipo manchego “Nos jugamos la vida, necesitamos el apoyo de la afición y espero que el ambiente de la Ciudad Deportiva sea parecido a lo que se vive en Argentina cuando Boca Juniors juegan la Bombonera”. “Sabemos que no dependemos de nosotras mismas para mantener la categoría pero nos vamos a dejar todo dentro de la cancha”.

Andrea Ojeda tuvo numerosas ofertas pero finalmente se decidió por Albacete y “cruzar el charco” al otro lado del Atlántico para recalar en España. “Aquí el fútbol es totalmente distinto al argentino, allí es más físico, aquí es más rápido y existe más nivel porque es de lo mejor de Europa”.

Miles de kilómetros separan su Buenos Aires natal de Albacete. Reconoce acordarse mucho de su familia y amigos aunque señala que “aquí me han tratado como una más y estoy muy contenta con el trato de mis compañeras y además Albacete es una ciudad bonita, con calidad de vida y con una gran gastronomía”.

Ahora Andrea Ojeda quiere lograr el objetivo de salvar la categoría y en La Mancha, a falta de lluvias esperan que sus goles lleguen como “agua de mayo” en la recta final del campeonato para volver a seguir militando un año más en la máxima categoría del fútbol femenino español.