Zidane: 15 años contra los Le Pen
Volvió a posicionarse en contra del Frente Nacional, como ya hizo en 2002, donde llegó a amenazar con no jugar el Mundial si Jean-Marie Le Pen ganaba las elecciones.Real Madrid vs Barcelona Dónde y cómo ver
El pasado domingo los franceses eligieron a Emmanuelle Macron, del nuevo partido centrista En Marcha, y Marine Le Pen, candidata de la formación ultraderechista Frente Nacional, para disputar la segunda vuelta de las elecciones en Francia. Zidane fue preguntado por esta carrera electoral en su país y se mojó de manera clara: “Mi mensaje es el mismo que 2002. Estoy muy lejos de las ideas del Frente Nacional y me gustaría evitar todo esto”.
Zidane hizo referencia a sus declaraciones en 2002, cuando Jean-Marie Le Pen, también del Frante Nacional y padre de la actual candidata, accedió a la segunda vuelta de las presidenciales francesas. ¿Pero qué dijo el entonces jugador del Real Madrid? Zizou dejó claro su rechazo a Le Pen y a lo que él representaba: “La gente tiene que votar. Es muy importante. Y, sobre todo, hay que pensar en las consecuencias que puede tener votar a un partido que no corresponde para nada con los valores de Francia. Soy francés. Mi padre es argelino. Estoy orgulloso de ser francés y estoy orgulloso de que mi padre sea argelino". Zidane, que pidió abiertamente el voto para el finalmente ganador Chirac, grabó un vídeo, por iniciativa del cantante de rap marsellés Akhenaton, contra Jean-Marie Le Pen. La cinta, de la que emitieron 60.000 copias, fue distribuida en 20 ciudades de Francia donde el líder del FN logró sus mejores resultados en la primera vuelta.
Un posicionamiento que no olvidó Le Pen, que en una entrevista en el periódico griego Eleftherotypia, arremetió contra el madridista por unas declaraciones en las que aseguró que si el líder del Frente Nacional hubiera ganado las elecciones presidenciales él no hubiera jugado el Mundial: “Zidane puede quedarse en España. Nadie le retiene. No tiene más que ir a donde le parezca bien. Que se quede en España porque nadie le retiene".
El caso es que la selección francesa, cuyo triunfo en el Mundial de 1998 fue la victoria de la multiculturalidad, siempre irritó al líder de la extrema derecha, que ya en junio de 1996, llegó a declarar: "Es artificial que se haga venir a extranjeros y luego se les bautice como equipo de Francia. Estos jugadores son representantes del papeleo". Y prometió revisar su situación cuando llegara al sillón presidencial, sitio que nunca consiguió ocupar.