El Valladolid 2010-11 disputó el playoff con catorce derrotas
Los de Herrera ya acumulan 13 partidos perdidos en las 31 jornadas disputadas hasta el momento en la Liga 1,2,3.
El dato está ahí, no sé si para invitar al optimismo o para preocuparse. El Real Valladolid se clasificó para el playoff de la campaña que estrenaba ese formato para ascender, habiendo perdido 14 partidos en la temporada regular, la 2010-11, y siendo séptimo pero con el filial del Barcelona por delante que no podía jugar los playoff. Esa campaña cayó eliminado por el Elche que había perdido nueve, mientras que Granada que fue el que ascendió perdía 10 y el cuarto en discordia, el Celta sólo nueve. Con la derrota ante el Nastic, el Valladolid de Herrera ha perdido ya 13 partidos en 31 jornadas, lo que limita su margen de error en los 11 partidos que restan. Hay algunos equipos que han logrado clasificarse para los playoff con un número de partidos perdidos incluso superior, como el Alcorcón, que sumó 15 derrotas en la 2012-13, por las 12 de Las Palmas, 13 del Girona y 12 del Almería que fue el que ascendió. Esa campaña fue la de peores números para los implicados en el ascenso. En la 2013-14 Las Palmas también accedió al playoff a pesar de sus 15 derrotas y el Córdoba que ascendió tuvo 13. El Valladolid de Rubi jugó el playoff con 12 derrotas en la 2014-15 y ese año ascendió Las Palmas de Herrera con ocho. La pasada campaña 2015-16 el Córdoba disputó las eliminatorias habiendo cosechado 15 y el Osasuna subió con 12 derrotas.
Djukic disputó el playoff y ascendió con sólo seis partidos perdidos en 2011-12
Seis son las temporadas que han decidido el tercer equipo que asciende mediante un playoff. Cinco ya están repasadas en el párrafo de apertura, queda por tanto una, la 2011-12 de grato recuerdo para los aficionados blanquivioletas. La campaña regular acabó con sólo seis derrotas, siendo el Valladolid de Djukic el equipo que menos partidos perdió aquel año, incluyendo Celta y Deportivo que ascendieron directamente, ambos con nueve derrotas en liga regular. Aquel Pucela fue tan seguro que incluso pisó fuerte en las eliminatorias, ya que empató en Córdoba sin goles y le endosó en la vuelta un contundente 3-0 a los andaluces; en la final ganó 0-1 en Alcorcón y sufrió en Zorrilla para empatar 1-1 y ascender, siendo el gol madrileño (Sales) el único que encajó en los cuatro partidos de aquel playoff.
