Óscar Duarte se rompe el cruzado: no jugará hasta 2018
El central del Espanyol, retirado en camilla de Ipurua, se sometió a pruebas este sábado por la noche ya en Barcelona. Su baja estimada es de entre siete y ocho meses.
En el tiempo añadido del Eibar-Espanyol de este sábado, Óscar Duarte despejó un balón en el área y se le giró la rodilla izquierda al apoyarla sobre el césped. Las muestras de dolor encendieron las alarmas. El costarricense no pudo continuar y se tuvo que retirar del campo y dejar a su equipo con diez.
Durante las horas siguientes reinó la preocupación, hasta que a última hora de la noche de este sábado se conocía el diagnóstico definitivo: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Esto comporta que el costarricense deberá permanecer un periodo estimado de baja de entre siete u ocho meses. O lo que es lo mismo, no volverá a jugar hasta 2018.
Sin duda, un durísimo golpe después de que en la primera exploración a la que fue sometido tras el partido, en el vestuario de Ipurua, se detectó una endorsis, que podría haber revestido un simple esguince. Fue al regreso a Barcelona, y tras haber remitido un poco la inflamación, cuando se reveló el diagnóstico definitivo y desesperanzador.
Aunque Quique Sánchez Flores fue moderadamente optimista en sala de prensa ("en principio, no es tan grave como podía parecer, da la sensación de que no hay inestabilidad en la rodilla"), la grave lesión hace que el jugador lógicamente no viaje con su selección.
Óscar Duarte ya sufrió este curso una lesión (la más importante de su carrera) que le mantuvo más de dos meses sin jugar: una sinovitis en el tobillo izquierdo. El central, que se había ganado nuevamente un sitio en la alineación, lleva disputados 15 encuentros del campeonato.
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