Leganés: guerra a la reventa de abonos para hinchas del Sporting
La aparición de algunos anuncios en Internet ha causado un fuerte revuelo. El club analiza cada caso por si fuera necesario tomar medidas.
La afición del Leganés se ha levantado en armas contra la reventa de abonos para la ‘final’ que el próximo domingo medirá a los de Asier Garitano y el Sporting de Gijón en Butarque a las 16:15. La alta demanda de localidades para el sector visitante y la baja oferta disponible (unas 400 entradas) ha hecho que algunos socios pepineros de nuevo cuño hayan pensado en hacer negocio a costa de esta situación. Se teme, por tanto, que estos asientos ‘subastados’ terminen en manos, no de hinchas blanquiazules ansiosos por asistir a un partido clave para la permanencia (que los hay), sino en manos de hinchas sportinguistas que animen a un rival directo en este importantísimo encuentro.
La Federación de Peñas ya ha denunciado el caso en redes sociales. Lo ha hecho adjuntando imágenes de algunos de estos anuncios. “Exigimos que el peso de la justicia caiga sobre todo aquel que revenda su abono a un aficionado rival”, reclamaba el pasado domingo en su perfil de Twitter.
El club, sabedor de que estos incidentes no son muchos, pero sí que hacen mucho daño entre su masa social, no ha tardado en ponerse manos a la obra. Sus servicios de seguridad ya cuentan con información puntual de todas las denuncias que han llegado a Butarque y han iniciado las pesquisas para investigar, uno por uno, los anuncios de venta de abonos. Si se descubrieran irregularidades, se iniciarán las correspondientes aperturas de expediente que, llegado el caso, podrían derivar en la expulsión de los socios que infrinjan el código de régimen interno.
Entre tanto, el Leganés tiene preparada una semana especial con llamadas a la afición para que se vuelque con el equipo de Garitano los días previos al partido y el domingo mismo. Aunque aún no se ha concretado nada al respecto, ya son muchas las voces que reclaman que se reciba a la plantilla en los accesos de Butarque unas dos horas antes del choque y no se descartan otras acciones especiales que conviertan el recinto en una caldera. Todo con tal de vencer casi tres meses después (el último -y único- triunfo en casa de los madrileños data del 21 de noviembre) y hacerlo ante el equipo en zona de descenso que más cerca está de los pepineros (a cinco puntos).
