Valverde, última visita con el Athletic y aspirante al Barcelona

Todo dice que no renovará y es alternativa a Luis Enrique si no sigue. Tiene su mejor arma en la capacidad para gestionar los grupos, en la estabilidad.

Actualizado a 4 de febrero de 2017 04:17 CET

JUAN FLORDIARIO AS

Ernesto Valverde puede visitar por última vez el Camp Nou como entrenador del Athletic. Aunque no haya tomado una decisión firme sobre su futuro, se antoja complicado que renueve el contrato que expira el 30 de junio. Son cuatro campañas seguidas, que unidas a las dos anteriores (desde 2003 hasta 2005), le situarán con el partido de hoy a la altura de Javier Clemente en citas ligueras. Se hará el número uno del santoral de entrenadores rojiblancos (290 encuentros) en Mestalla, un lugar donde también triunfó como técnico. Visto con perspectiva, aquello tuvo mucho mérito.

Siempre se ha relacionado a Txingurri con el Barça. Más aún cuando el director deportivo era Andoni Zubizarreta, quien apostó por él desde el filial para suplir a Jupp Heynckes en el Athletic. El alemán fue, precisamente, el último que ha ganado con los rojiblancos en el Camp Nou. Lo hizo dos veces, una por etapa.

Valverde conoce bien la casa azulgrana y tiene su mejor arma en la capacidad para gestionar los grupos, en la estabilidad que transmite en el día a día. Zubi trató de llevárselo al Barça con la enfermedad de Tito Vilanova. Se pudo ahorrar la llamada: si hay alguien fiel ese es Ernesto. Estaba de pretemporada con el Athletic en Austria. Y tenía como presidente a un amigo, Josu Urrutia.

Luis Enrique seguirá si quiere. Juan Carlos Unzué es la solución de casa. Si el Barça mira fuera, ahí está Valverde, triunfador en todos los clubes menos en Villarreal, donde no cuajó su estilo de presión y menor contemplación con la pelota, y tuvo a Juan Carlos Garrido como enemigo en casa.

Quizás más conocedor del juego azulgrana sea Eusebio Sacristán, pero renovará dos años por la Real. Txingurri pasa examen en el Camp Nou, donde nunca ha ganado. Guarda buen recuerdo de dos empates, el del Tamudazo y del 1-1 de la Supercopa que dio un título al Athletic 31 años después.

Cuco Ziganda. Su sustituto en Bilbao, salvo monumental sorpresa, sería su amigo Cuco Ziganda, que ha hecho una labor impagable para el club desde el filial en estos seis años con Josu Urrutia. Es muy bien visto en el vestuario, en especial por Raúl García, líder del futuro cuando Aduriz decida echarse a un lado.