Villalibre sube ya como alternativa a Williams
Valverde no debe ver bien al Merino y ha decidido a tres días del partido subir a Asier Villalibre, que en tres partidos con los leones ya ha ofrecido dos asistencias
EI Athletic en su extensión se mostró ayer indignado por no haber recibido el perdón de Apelación alguna de las dos tarjetas amarillas, injustas a todas luces, mostradas por Jaime Latre en Leganés a Aritz Aduriz y Beñat Etxebarria, que por acumulación no podrán jugar el domingo frente al Atlético.Especial mosqueo había con la segunda de ellas, cuyo vídeo corrió como la pólvora por las redes sociales.
En principio, Ernesto Valverde tiene claro que el sustituto de Aduriz será Iñaki Williams, con quien intercambió ayer impresiones sobre la posición y movimientos que debe poner en práctica para hacer daño a Godín, que descansó ayer durante 75 minutos ante el Eibar. El Athletic tiene que vivir de sus diagonales, sobre todo cuando el Atlético trate de dominar el juego. Txingurri tenía en principio la idea de exprimir a Sabin Merino, que visitará Múnich al día siguiente del partido. Será valorada su pubalgia y operada probablemente el martes.
Sin embargo, no debe ver bien al canterano, ya que a tres días del partido decidió el ascenso del goleador del Bilbao Athletic, Asier Villalibre, que en tres partidos con los leones ya ha ofrecido dos asistencias, ante Eibar y Rapid de Viena, a Muniain y Saborit. También salió en el tramo final de la derrota ante el Betis. De Marcos, listo. Quien ha mejorado mucho en sus prestaciones en estos días es Óscar de Marcos, que salió un rato en Butarque dos meses después de caer lesionado. El técnico tiene la opción de repetir con Lekue, que sufrió mucho con Machís el sábado, o tirar ya del pulmón de Laguardia. Con Etxeita fuera del grupo corriendo por su cuenta y Aduriz en el campo contiguo haciendo carrera y quejándose de sus molestias en la pierna izquierda, el cuerpo técnico exprimió a los futbolistas con partidillos en espacios reducidos, en los que brilló por efectividad Aymeric Laporte. Hay muchas ganas en la plantilla de terminar con el gafe que tiene el equipo contra el Atlético, al que no se ha ganado en la segunda etapa de Valverde en Bilbao. Es la bestia negra del club rojiblanco desde la final de Bucarest con Bielsa.
