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VENEZOLANOS EN EL EXTERIOR

Juanpi Añor: de 'paquete de Rondón' a heredero de Isco

Llegó al Málaga en plena adolescencia, 16 años, con el fichaje de Salomón Rondón, el hombre que abrió el grifo ‘vinotinto’ en La Rosaleda. El fútbol inglés ya se ha interesado.

Juanpi Añor: de 'paquete de Rondón' a heredero de Isco

Juanpi Añor (Caracas-Venezuela, 24-1-1994) vino ‘de paquete’, como él mismo rememoraba, cuando el Málaga fichó en el verano de 2010 a Salomón Rondón, el primer ‘vinotinto’ de la era Al-Thani. El cuadro costasoleño pagó a Las Palmas 3,6 millones de euros y quien más quien menos alucinó de que el nuevo dueño del club, el jeque de Qatar Abdullah Al-Thani soltase, a tocateja semejante dineral por un futbolista que jugaba en Segunda División (dos años después, Rondón fue traspasado al Rubin Kazan por diez millones de euros). Los agentes Juan Mata, padre de Mata, el futbolista que triunfa en el Manchester United y Juan Pablo Martínez, impusieron o recomendaron (puede que las dos cosas) que en el ‘lote’ entrase este chavalín de entonces 16 años, formateado en las categorías inferiores del Caracas FC. Mata y Martínez son mucho más que unos representantes. “Como si fueran sus tíos” reconocen en su familia. Se les aprecia. Tras estar una semana a prueba. Manel Casanova, director de cantera y su entonces ayudante Francesc Arnau, (hoy director deportivo) le dieron el OK. “Era como un sueño” confesó.

Rondón se convertía en la fogosa apuesta ofensiva de Jesualdo Ferreira, el entrenador portugués que solo duró nueve jornadas y fue reemplazado por Manuel Pellegrini. Juanpi hacía sus primeros pinitos en las categorías inferiores, en el San Félix. Su técnica exquisita, su privilegiado golpeo con las dos piernas y su descaro en el uno contra uno empezaron a llamar la atención de los técnicos que vieron madera y maneras en aquel chico de finos modales y cabeza amueblada. Su padre, Bernardo, fue internacional con su país y su hermano, también llamado Bernardo, anda por Estados Unidos en el Minesota United. “Fue duro verle partir con 16 años” comentaba un progenitor que ahora presume de hijo.

Muchos vieron en Juanpi un heredero de Isco. El del Arroyo de la Miel (zona de Benalmádena, localidad de la provincia de Málaga donde nació Isco) se había marchado al Real Madrid por 27 millones de euros y señaló como su sucesor a Portillo. El de El Palo (popular barrio malagueño) no se afianzó y acabó emigrando al Betis, todos se fijaron en Juanpi más que nada por similitud en lo que a talento se refiere.

Pese al orgullo que siente por pasear el nombre de Venezuela por todo el mundo, Juanpi no está conforme con el momento político y de inestabilidad que vive su querido país. “En España te puedes dar el lujo de estar muy tranquilo con tu familia, de pasear e ir al centro comercial. La política en Venezuela en estos momentos es un desastre” confesó en una entrevista concedida a AS.

Tras debutar contra el Valencia en La Rosaleda en un desastroso partido que terminó 0-3 la carrera de Juanpi empezó a subir como la espuma. Su espaldarazo definitivo fue en el Santiago Bernabéu en un Málaga con diez jugadores por expulsión de Amrabat. Sus contagolpes, verticalidad e inteligencia amargaron los últimos minutos del equipo blanco que debió conformarse con el 0-0. “Me gusta partir desde la banda derecha para ir incorporándome con libertad de movimientos a la media punta” es su filosofía de crack.

De su paso por la selección de Venezuela es recordado su maravilloso gol nada menos que a Argentina en partido eliminatorio para un Mundial de Rusia que se ha puesto imposible. Siente eterno agradecimiento por Juan Arango. “Fue quien abrió camino para que los futbolistas venezolanos pudiéramos jugar en Europa” comenta con respeto y consideración para con quien fuera fantástico jugador del Mallorca. Aunque ya hay equipo que le han echado el ojillo) ingleses como el Southampthon), Juanpi tiene dos sueños: “Quedarse muchos años en el Málaga y triunfar también con su selección”. Va para figura. Si es que ya no lo es.