Abelardo perdona mucho dinero: "Lealtad hacia mi club ante todo"
El ya exentrenador del Sporting de Gijón dio una rueda de prensa en Mareo para despedirse del club, con el que tenía contrato hasta verano de 2021.
Mareo acoge a estas horas una de las jornadas mas emotivas de los últimos tiempos, con la despedida de Abelardo, entre lágrimas que compartió a su lado el presidente del Sporting, Javier Fernández. "Lloro por esta gente, por este club y por esta afición, a los que tengo tanto cariño", afirmó el técnico gijonés.
El presidente del Sporting de Gijón, Javi Fernández, comenzó la rueda de prensa agradeciéndole estos dos años y medio al ‘Pitu’ Abelardo: “Ayer fue un día difícil para mí y para todo el club. Hemos intentado alargar esta situación, a lo mejor indebidamente. Algo que nos había mostrado el ‘Pitu’ en diciembre. Quizá lo hemos alargado innecesariamente. Es complicadísimo para la entidad y para el club. Ha habido críticas muy duras. No es justo que se haya convertido de repente en otra persona. Sigue siendo el mismo y va a seguir siendo así de por vida. Nos habíamos comprometido a que en cualquier momento en que alguno de los dos no estuviera a gusto llegaríamos a un acuerdo y ha perdonado dinero al club, incluso de este año, porque era la única forma que teníamos para traer a otro entrenador. Nuestra relación no va a cambiar y estará siempre en los corazones de los aficionados del Sporting”.
Tras el breve discurso, Abelardo comenzó a leer sus palabras embargado por la emoción y tuvo que cortar su mensaje en tres momentos, cundo se refirió a su hijo, a sus jugadores y a la afición. El ya ex entrenador del Sporting tuvo palabras de agradecimiento para muchas personas del club, a los que citó uno a uno. Nico Rodriguez, el director deportivo, fue el único al que no mencionó.: “Para mí es muy duro. Primero agradecer a Javi todo el apoyo que me ha dado. Han sido momentos muy alegres y duros, pero mucho más alegres. Él ha tenido mucha fe en mí y se lo agradeceré de por vida. Con respecto a la situación, veía que el equipo no transmitía lo que yo quería en el campo. Toda la culpa es mía, no de los jugadores. Por eso hablé con Javi para acordar mi salida del club. Mi familia y sobre todo mi hijo, lo han pasado mal durante todo este tiempo. Debo agradecérselo a los jugadores. Sin ellos no hubiera podido estar aquí en estos dos años y medio. También a mis amigos y a toda la gente que trabaja en el club”.
Perdonar casi 4 millones de euros: “Como sportinguista, aunque hubiera tenido un contrato hasta 2020, no podría hacerle eso el club de mis amores. Ya lo hice en otros clubes y no iba a ser distinto aquí. Como para no hacerlo. No tengo problema en perdonar dinero. Hay cosas más importantes. Lealtad hacia mi club ante todo”.
Tensión en el banquillo: “Ha sido una presión terrible. Cuando llegué al Sporting tenía el mismo pelo, pero no tenía estas canas”.
Futuro: “Me gustaría seguir entrenando. Le he dicho a Javier que estoy a su disposición”.
Próximo entrenador: “Quiero dar toda la suerte al nuevo entrenador, que lo va a hacer muy bien”.
Agradecimientos: “Dar las gracias a la gente y a la afición. Increíble su comportamiento conmigo a todos los niveles. Mi hijo ayer me empapó de las redes sociales, que yo nunca miro, y el cariño que me han mostrado. Gracias a la prensa por vuestro trato, por lo que me habéis aguantado, por mi mala leche y por vuestro buen humor”.
El momento más duro: “No es duro. No lloro por dejar de ser entrenador del Sporting, lloro por el cariño que le tengo a toda esta gente. Sé que la etapa como entrenador o futbolista se acaba. Seguiré viniendo porque mi hijo juega en el cadete, pero no convivir con la gente que trabaja aquí día a día me entristece”.
Qué ha fallado: “No busques cosas raras. El fútbol son resultados y son los que mandan. Como entrenador asumo lo que me toca. Es la ley del fútbol, pero mi parte es importante”.
Despedida de la plantilla: “He estado con ellos y me he despedido. Les he dado las gracias. He tenido suerte de entrenarles. Les he agradecido su profesionalidad y su entrega hacia sus colores”.
Otro cargo: “No valoro otro cargo. Necesito descansar. Mi familia se lo merece, que lo ha pasado muy mal. Ahora toca desconectar”.
