Invicto y triunfal desde el "se ha puesto difícil en casa" de Poyet
El uruguayo cargó contra la grada tras perder contra el Espanyol. Después, con Víctor, el Betis ha ganado cuatro partidos y empatado otro en el Villamarín.
“Se está poniendo difícil jugar en casa”, afirmó Gustavo Poyet justo después de su último partido casero como entrenador del Betis, un 0-1 ante el Espanyol. No era la primera vez que Poyet cargaba contra la grada helipolitana y de hecho en sus constantes ataques estaba, seguramente, el descontento del público cada vez que veía como su equipo no daba la talla en el Villamarín.
El técnico uruguayo sería destituido días después tras sucumbir de nuevo en el Villarreal y aquellas palabras le han perseguido con el nuevo inquilino del banquillo verdiblanco, Víctor Sánchez del Amo, que permanece invicto y con unos números notables de local.
Cuatro victorias y un empate contemplan al sucesor de Poyet en el Benito Villamarín. En Liga ganó a Las Palmas (2-0), Athletic (1-0) y Leganés (2-0) y empató con el Celta (3-3). En Copa derrotó al Deportivo (1-0) en la ida de dieciseisavos.
Estos días, ya en el banquillo del Shangai Shenhua de China, Poyet ha vuelto a cargar contra los aficionados verdiblancos en una entrevista para su país: “Fui allí por la hinchada pero me encontré algo diferente”, afirmó sin tapujos el charrúa. No dice, eso sí que desde que se marchó el Betis gana casi todo lo que juega al calor de su gente.