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AS COLOR: Nº 7

El otro lado de Tony Leblanc: fue portero de fútbol y boxeador

Recuperamos la última entrevista que concedió el actor a un medio de comunicación antes de fallecer a finales de 2012. Fue a AS.

Entrevista a Tony Leblanc.
JESUS AGUILERADIARIO AS

Ignacio Fernández Sánchez (Madrid, 7 de mayo de 1922- Villaviciosa de Odón, Madrid, 24 de noviembre 2012), que es como se llamaba en realidad este mítico actor, recibió a AS días antes de fallecer. De hecho, fue la última entrevista que concedió a un medio de comunicación y que hoy recuperamos. En ella, recuerda sus tiempos de boxeador y futbolista y habla del club de sus amores, el Real Madrid... y del Barça.

—Hace 41 años, usted era protagonista de un reportaje en AS Color en el que desvelaba que había sido boxeador y portero de fútbol. ¿Qué recuerdos tiene de aquella etapa de prolijo deportista?

—Como boxeador empecé hace 70 años, que se dice pronto. Empecé en el gimnasio de boxeo La Gimnástica (estaba en la calle Barbieri, hoy Chueca), estuve un año y mi primera pelea fue contra el célebre Antonio Monzón, que fue campeón de España y de Europa y que también se entrenaba en el mismo gimnasio. Le gané a los puntos. Después de siete combates cada uno tras aquel primero de debut, me llamaron para que en el trofeo Escrivá de Rabannè le diera la revancha y dije que no, pero no por miedo… sino por prevención... Y es que de los siete combates que Monzón disputó después, cinco habían sido por KO (otro a los puntos y otro por incomparecencia), de hecho a los púgiles rivales les habían despertado abajo en los vestuarios... Vamos, que no quería que me matase…

—¿Cuál era su golpe favorito?

—El crochet y también me gustaba el directo (jab), aunque dependía del rival que tuviera enfrente. Yo era de los de ‘la mejor defensa es un buen ataque’. Con esta frase, por cierto, y Helenio Herrera, que nos tuvimos mucho aprecio mutuo, tengo una anécdota graciosa: en cierta ocasión, HH, como se le conocía, dijo que la había inventado él para el fútbol y le contesté que estaba equivocado, porque ya la había dicho con anterioridad el mítico boxeador Joe Louis. Volviendo a lo de mis golpes favoritos, ¿sabe quién me enseñó y me hizo perfeccionar mi manera de pegar? Ignacio Ara…

—Perdone mi incultura en historia del boxeo, ¿quién era?

—Pues una celebridad del boxeo español (Sigües, Zaragoza, 1909-Buenos Aires, 1977). Campeón de Europa del peso medio y pesado de España, con 38 años, y peleó casi 300 combates. Casi nadie.

—¿Por qué practicó el boxeo?

—Era uno de los deportes de la época, tenía mucho tirón, no como ahora, a pesar de que hay una cadena de televisión que da combates, aunque antiguos, maravillosos por otra parte. Una vez me preguntaron por el sentido del boxeo y respondí que, para practicarlo, te tiene que gustar mucho, y, segundo, el boxeo es un deporte, es decir, que se tiene que practicar en un cuadrilátero, no en la calle; eso no es de hombres ni es deporte.

Entrevista a Tony Leblanc.
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Entrevista a Tony Leblanc.JESUS AGUILERADIARIO AS

—¿Tenía sobrenombre?

—No, era conocido como Fernández. Lo de ‘El Tigre de Chamberí’ fue para la película con el mismo título, muchos años después.

—¿Logró algún título?

—Sí, fui campeón de Castilla del peso medio con el gimnasio ‘La Ferroviaria’ (estaba en la zona de Lavapiés). Luego pasé al welter.

—¿Y el fútbol? Porque Tony Leblanc llegó a jugar en Tercera División…

—Es cierto. Yo jugaba en el Fuyma, de portero, y me fichó el Chamberí, que también estaba en Primera Regional. Hicimos una gran temporada y nos jugamos subir a Tercera con el Carabanchel. Con un empate ascendían ellos. Nosotros marcamos un gol en la primera parte y a falta de cinco minutos nos pitaron un penalti en contra. Ahí estaba yo bajo palos y lo paré. Yo creo que no he recibido tanto cariño, ni felicitaciones en mi vida, les faltó hacerme un monumento. ¡Qué afición tenía el Chamberí, era increíble!

—¿Qué empezó practicando primero?

—El fútbol.

Tony Leblanc en el un partido de 2001 entre el Atlético de Madrid y el Sevilla.
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Tony Leblanc en el un partido de 2001 entre el Atlético de Madrid y el Sevilla.DAVID LOPEZDIARIO AS

—Oiga, ¿por qué portero?

—Porque me cansaba.

—¡Cómo que se cansaba!

—Sí, porque yo fumaba casi tres cajetillas diarias, así que ya me contará...

—A pesar de ser portero, en el reportaje de AS Color de 1971 decía que su ídolo era Luis Molowny, ¿por qué?

—Porque ‘El Mangas’, como así le llamaban, me encantaba cómo jugaba. Era zurdo, rápido y tenía una clase soberbia. Daba unos pases maravillosos y tenía un disparo demoledor. Era un genio.

—Después del éxito con el Chamberí, ¿no se planteó que podría tener más recorrido en el fútbol?

—Nunca fue mi aspiración triunfar, ni tampoco en el boxeo. De hecho, me gustaba más el fútbol, lo del boxeo era porque te daba caché en la familia… Aunque el fútbol también era peligroso: la gente en los campos, que eran de tierra, claro, estaba casi pegada a los jugadores; una vez un desalmado me tiró una piedra, me hizo bastante daño, pero yo, no me lo pensé, la cogí y me fui hacia él y se la devolví... se montó una buena trifulca.

Miguel Ángel Vasco entrevistando a Tony Leblanc.
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Miguel Ángel Vasco entrevistando a Tony Leblanc.JESUS AGUILERADIARIO AS

—¿Dejó los dos deportes a la vez?

—Sí, a los 21 años. Recuerdo que me llamaron del Sindicato de Deportes y me preguntaron si conocía a Ignacio Fernández Sánchez y respondí: “Sí, soy yo”; “¿y a Tony?” y contesté: “Soy yo también”; entonces me soltó aquel señor: “¿Cómo es posible que pelee usted los sábados y juegue los domingos?”. En fin, que lo tuve que dejar.

—Tony Leblanc siempre ha reconocido ser un gran aficionado madridista…

—De hecho, tengo la medalla de oro y brillantes del club sin haber sido nunca socio. También soy muy crítico, cuando hay que serlo, de hecho, a veces me llaman y cuando no juegan bien, no tengo pelos en la lengua.

—¿Y cuándo empezó usted a tener simpatía por el Madrid?

—De pequeñito. Mi padre me empezó a llevar al campo a ver al equipo y me entusiasmó. En cierta ocasión coincidimos en Radio Madrid don Santiago Bernabéu y yo. Me preguntaron por el fútbol y relaté las alineaciones de ocho o diez equipos, no recuerdo con exactitud, del Madrid; cuando él lo escuchó, me paró y me felicitó. Desde entonces, fuimos grandes amigos, también de don Vicente Calderón. Por cierto, que con 18 años estuve a punto de jugar en el ‘vecino’ Atlético Aviación…

—Cuente, cuente…

—Entonces estaba en Segunda. Ya sabe que después de la Guerra unos gerifaltes lo subieron a Primera y se llamó Athletic Club de Madrid. Me probaron de portero, jugué cinco partidos, dos, los que recuerdo, ante Zaragoza y el Coruña. No era en Liga, era en la pretemporada. En esos cinco partidos, sólo me metieron dos goles, uno de penalti. Me pidieron mis señas y mi teléfono, que aún recuerdo: 17 7 13… (impresionante su memoria), pero la llamada se hacía esperar, se hacía esperar… Entonces decidí irme al Chamberí, me dieron 3.000 pesetas, y al día siguiente de comprometerme vinieron al Museo del Prado, donde ya sabe que yo nací, ya que mi padre era portero, para traerme el contrato. Dije que no porque ya había firmado con el Chamberí.

—Usted ha visto nueves Copas de Europa del Madrid. ¿De todos los equipos, cuál le ha gustado más?

—El de los ye-yé era impresionante, el de la Quinta del Buitre, el que llamaban de Los Galácticos, el de ahora de Mourinho… Si es que el Madrid ha tenido grandísimos jugadores: Molowny, Di Stéfano, Gento, Puskas, Amancio, ‘El Buitre’, Hugo Sánchez, Raúl, Zidane, Figo, Ronaldo, ahora Cristiano, Ozil…

—Ya me ha hablado maravillas de Santiago Bernabéu, ¿y de Florentino Pérez qué me dice?

—Pues que se le critica mucho y yo no lo entiendo. Si se gasta el dinero que se gasta será porque lo tiene, o porque se lo dan los bancos, mejor dicho, pero los aficionados del Madrid queremos ver en el equipo a los mejores y los mejores valen mucho dinero. Yo admiro mucho su personalidad.

—¿Y de Mourinho?

—Es un grandísimo entrenador, que nos ha dado una Liga después de unos cuantos años, pero le están haciendo antipático por la cantidad de palos que le dan, muchos de ellos injustos; otros, no, como con algunos de sus gestos o cuando le metió el dedo en el ojo al del Barcelona (Tito Vilanova). Además, le están haciendo más famoso de lo que ya era.

—¿Y del Barça?

—Que es uno de los mejores equipos del mundo… después del Madrid.

—¿Usted cree, como se dice, que Messi es el mejor jugador, no del mundo, sino de la historia?

—No. Es verdad que es un grandísimo jugador, aunque no mejor que Cristiano Ronaldo, eso quiero dejarlo claro, son distintos; además, los compañeros que tiene, Iniesta, Xavi, Cesc… le hacen aún mejor.

—Gracias por recibir a AS 41 años después.

—Gracias a ustedes. Estáis invitados a venir dentro de otros 41...