El Atlético vuelve al trabajo entre la niebla y el silencio
Sólo saltaron al césped los no titulares ante el Villarreal. Oblak y Tiago continúan pendientes de pruebas para conocer el alcance de su lesión.
![Los jugadores del Atlético durante el entrenamiento.](https://img.asmedia.epimg.net/resizer/v2/BZ74LQVPY5IBLHWNPHS4PVCDLU.jpg?auth=ce8e1acb3d655488464468ca2401833f0ae167eaa0662b869876c25d22a3af6b&width=360&height=203&smart=true)
Bajo una niebla espesísima que obliga a a mantener encendidos los focos del campo 1 del Cerro del Espino, regresaba el Atlético a los entrenamientos. O, más bien, los que no fueron titulares en Vila-real. Seis de la primera plantilla: Torres, Cerci, Giménez, Carrasco, Thomas y Vrsaljko (más Moya y Moreira, aparte con Vercellone; y seis canteranos) en un ambiente gélido, frío, callado.
Así estaba también Simeone, que saltó al campo cuando sus futbolistas ya entrenaban (el resto, gimnasio, menos Oblak y Tiago, pendientes de pruebas), y permanecía meditabundo, solo, dando pasos a un lado, treinta, al otro, otros treinta, mientras en el cerro solo se oía una voz, la del Profe, "dale, dale, dale".