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OVIEDO 2 - LEVANTE 0

El Tartiere encoge al líder

Los de Hierro completaron un gran partido que les permitió vencer al casi intratable Levante con goles de Michu y Pereira y se asientan en la parte alta de la clasificación.

El Tartiere encoge al líder
Eloy AlonsoDIARIO AS

Levante-Rayo en directo

Habló Hierro en la previa de un complicado reto para el Oviedo, pero el examen, exigente, se lo puso el Tartiere al intratable líder de Segunda. Y el Levante no pudo con la prueba. Los azules regresaron a su mejor versión, gregarios en defensa y eléctricos en ataque, para imponerse con autoridad al Levante: 2-0. El inédito ataque formado por Michu y Pereira, la extraña pareja, fue suficiente para desactivar a los de Muñiz.

Y eso que salió mandón el Levante, como si el liderato le obligara a dar un paso adelante. Aunque su dominio fue estéril. La defensa azul, acostumbrada a defender con cierto orden cerca de su portería, apenas sufrió rasguños. De hecho, la primera ocasión fue local. Rocha filtró a Pereira en el área y éste cedió atrás, donde apareció Linares. El zurdazo del delantero se estrelló contra el larguero pero sirvió para recordar que al Oviedo le bastaba un chispazo para asustar. El Levante cogió aire con la pelota. Incluso se acercó a Juan Carlos. La pelota cayó en la frontal y Campaña ajustó el disparo, pero se fue cerca del poste. Antes del descanso, Susaeta puso la réplica: su falta se fue cerca del palo.

Un Oviedo intenso en la segunda parte

La segunda parte mostró a un Oviedo más intenso, con Pereira y Michu especialmente acertados. De la combinación entre ambos nació el primer gol. Pereira la puso arriba y Michu se elevó mas que nadie para cabecear a la red. Un gol de fe. El Levante contestó: Roger centró pero Chema no acertó en un remate que parecía sencillo. El Oviedo replicó al instante. Balón de Christian que Pereira tocó lo justo para mandar el balón a la red. La pólvora era de los azules.

Con los dos zarpazos, los de Hierro tenían el partido en la mano. El resto solo fue repetir la fórmula usada otras veces: defensa intensa ante dominio estéril del Levante, incapaz de superar el examen del Tartiere.