Nueve días después de expresar en público su malestar por unas negociaciones que no llegan, las de su renovación , Víctor Sánchez zanjó este martes la controversia, que le había llevado a un tenso cruce de declaraciones con el consejero delegado, Ramon Robert. “Él ya lo habló. El viernes charlamos. Le dije lo que pensaba, él me dio su opinión y a partir de ahí está solucionado. A partir de ahora hablaremos en privado, como tiene que ser, y esperemos llegar a un acuerdo”, resumió, en Sant Adrià. Víctor reconoce que no le “ha gustado todo lo que ha pasado esta semana. No me gusta ser noticia, ni el centro de atención. Hablé en ese momento (justo después del partido ante el Athletic, en Cornellà) porque no había Liga la semana siguiente y en ningún momento creí que afectara al grupo. Pensé en mí egoístamente pero también en el grupo, por no influir”, reflexionó. Y especificó que sus declaraciones no fueron fruto de una calentura: “No es una explosión. Lo que digo lo hablo habiéndolo meditado. Tenía mis motivos, lo hablé con Ramón y nos sentaremos. A lo mejor no era el sitio o la manera de hacerlo, pero es un caso cerrado. No va a haber más problemas con eso”, aseguró. Sobre los motivos que le llevaron a expresar su malestar con el consejero delegado, Víctor Sánchez abundó: “Esperaba un paso del club. Ramón me ha explicado lo que él ve y lo que hay dentro del club, yo le dije lo que me impulsó a hablar. Pero no va a haber más problemas con eso porque lo vamos a solucionar seguro. Tanto el club como yo tenemos ganas de entendernos y de llegar a un acuerdo”. Y añadió: “Yo no he tenido tensión con él, hablé de algo que sentía así, pero no estoy enfadado con Ramón. Él ha hecho un trabajo con el club, el verano fue largo y duro, y no voy a entrar en lo que el club ha hecho o dejado de hacer. Tenemos una buena relación, hablamos de mil cosas porque así es siendo capitán del equipo”. Ahora, pues, se abre otro escenario: el de las negociaciones para la renovación. “No tengo fecha ni cita prevista. El club sabe de mi predisposición a estar aquí muchos años porque estoy cómodo y feliz, y quiero seguir aquí muchos años. Seguiremos hablando, sin prisa, y ojalá todo llegue a buen puerto”, indicó. Mientras, Víctor ha “hablado con el director deportivo y con el entrenador. Hemos intercambiado visiones sobre este tema. Desde dentro del vestuario no van a decir nada malo, ellos me quieren y no me puedo quejar porque siempre me han apoyado. Estoy tranquilo, contento, quiero dedicarme a jugar, es lo que me gusta”, indicó. Lo que el centrocampista quiso dejar claro es que “no es un tema de desequilibrios (salariales), no lo peleo por eso sino por un tema personal. En ese sentido, cada uno debe mirarse el ombligo y pensar lo que está aportando. Cuando te miras en otros compañeros te vas a equivocar porque hay mil situaciones distintas”. Finalmente, sobre el partido del domingo ante el Alavés, Víctor analizó que “es un equipo fuerte sobre todo en casa. Han cambiado mucho la plantilla y el entrenador les transmite esa idea de grupo. Va a ser un partido difícil, no va a ser cómodo para nosotros. Sabemos que vamos a tener que ir a la guerra, a por segundas jugadas, a ser más intensos que ellos, y a implantar nuestro juego, que en tramos ante el Athletic fue muy bueno”.