Un año sin penaltis a favor
Hace 12 meses que el Espanyol no se beneficia de una pena máxima. Y eso que en las últimas jornadas se reclamaron: ante Las Palmas, Villarreal e incluso contra el Real Madrid.
Además de las cuestiones tácticas, de la solidez defensiva y de la sequía en ataque, en el Espanyol son objeto de debate unas acciones que pueden cambiar el signo de los partidos: los penaltis. Ya van dos jornadas, ante Las Palmas y Villarreal, que el equipo reclama ese tipo de infracciones. Primero Felipe Caicedo, después Gerard Moreno. Pero, casualidad o no, los arbitrajes les son esquivos. Y de eso no hace un par de partidos, sino un año completo.
Hace justo 12 meses, desde el 23 de octubre de 2015, que el Espanyol no ve cómo le señalan un penalti a favor. El último fue a domiciio, ante el Rayo Vallecano (3-0), y para más inri Jorge Franco ‘Burgui’ lo falló, aunque fue en el tiempo añadido y ya no hubiera servido de mucho. La anterior pena máxima favorable fue poco antes, el 3 de octubre en casa contra el Sporting de Gijón (1-2), y aunque Felipe Caicedo la falló, sí aprovechó el rechace para convertir el gol. Así que para encontrar el último penalti anotado por el Espanyol hay que remontarse al 19 de septiembre de 2015, en Anoeta, ante la Real Sociedad (2-3). Marco Asensio lo provocó y Gerard Moreno lo transformó.
Sólo tres penaltis en una Liga, el último hace ya un año, representan un bagaje cuando menos llamativo (el Barça, por ejemplo, obtuvo la friolera de 19). El consuelo será pensar que a veces los árbitros quitan y en otras ocasiones, lo devuelven. Será eso.