Alrededor de 2.000 cadistas invadirán el fortín de Vallecas
El Rayo llega invicto e imbatido en casa, pero también plagado de lesiones. Sandoval tendrá que recomponer su once y Álvaro tiene dudas en la mediapunta. La grada será una fiesta.
Vallecas será el punto de encuentro de dos aficiones hermanas y de dos conjuntos que vagan por la mitad de tabla mirando de reojo hacia lo más alto. Los franjirrojos se saben fuertes en su casa, donde están invictos (empataron con el Valladolid y ganaron a Mallorca y Getafe) e imbatidos (tres goles a favor y ninguno en contra). Sobre esos muros tratan de cimentar el punto de inflexión del equipo, que encadena un triunfo y un empate. Por su parte, el Cádiz viene de caer a manos del Oviedo y lejos del Carranza sólo ha arañado un empate.
Sandoval tendrá que hacer frente a una epidemia de lesiones. Cuatro (Mojica, Dorado, Javi Guerra y Aguirre) se confirmaron esta semana tras el partido de Reus y después de tres encuentros en una semana. Se unen a Baena e Iñiguez en la enfermería. Además, Ebert (con molestias en el codo izquierdo por una mala caída) y Nacho no entraron en la convocatoria rayista, donde sí están Galán y Embarba al superar sus molestias. La mayor incógnita está en la mediapunta. El de Humanes puede recuperar ahí a Trashorras o tirar de Piti, Lass, Santi e incluso Miku.
Una demarcación que es también el quebradero de cabeza de Álvaro, quien baraja tres nombres: Santamaría, Eddy Silvestre (al que Competición quitó la roja) y Rubén Cruz. El técnico pierde piezas importantes por lesión: Garrido y Álvaro García.
Hubo un Rayo ‘gaditano’
Habrá unos 2.000 cadistas en las gradas de Vallecas (algunas peñas procedentes de Zaragoza, Ciudad Real...), que lucirá su mejor entrada del curso. Y ambas hinchadas vivirán juntas las ‘Jornadas de la Afición’ (calle Dolores Folgueras 6, desde las 13:00). Color y alegría en algo más que un partido, en un reencuentro entre hermanos.