Volantes o extremos es la duda de Simeone para la medular
El equilibrio sigue siendo la prioridad. Ante Alavés y Leganés la media fue cambiado por completo en los dos partidos. Aún no hay una idea clara sobre la línea más importante.
Volantes o extremos. Simeone y su cuerpo técnico se afanarán en los próximos días para dar con la tecla en el centro del campo, después de que los primeros dos partidos no dejarán todavía clara la apuesta por Gaitán o Carrasco en el once, juntos o por separado, en favor del equilibrio que siempre condiciona al equipo. Prácticamente en ninguno de los dos partidos ninguno de los centrocampistas acabó jugando en el puesto donde comenzó y solamente Koke y Saúl han sido los únicos medios que han jugado todos los minutos.
Simeone tiene la plantilla con más opciones desde que aterrizó en el Atleti, pero ahora la duda estriba en introducir esos futbolistas de talento sin perder el equilibrio que ha convertido en legendario a este equipo. Así, tras las malas sensaciones del Carranza, en el estreno frente al Alavés apostó de inicio por un 4-1-4-1 con Tiago por delante de la defensa y Saúl, Gabi, Koke y Carrasco por detrás de Gameiro. El portugués había sido lo más positivo de la pretemporada, pero al descanso ya dejaba su sitio a Torres para afilar al equipo e inmediatamente se volvía al tradicional 4-4-2 con Koke y Gabi al mando. El gol no llegaba y tocaba abrir más el campo, Gaitán entró por Gabi, pero apenas coincidió con Carrasco trece minutos. Al final el Atlético acabó desbocado atacando con Torres, Gameiro, Correa y Gaitán, consiguió marcar en el 93’ y encajar en el 95’…
En Butarque Simeone recurrió a su clásico 4-4-2 con Koke, Gabi, Augusto y Saúl y no hubo final feliz. Volvió a retirar a un mediocentro, esta vez a Gabi, para que entrara Carrasco en la zurda y cambió el aspecto de la línea mandando a Augusto a la derecha, con Saúl y Koke en el centro. El Leganés resistía y Gaitán volvió a ser la solución. El ex del Benfica dejó algún buen pase filtrado, pero el empate no se deshizo.
Tanto Leganés como Alavés entregaron al Atleti la pelota. En Butarque la posesión fue del 64%, mientras que en el estreno fue de más del 62%. El Celta, el siguiente rival, ha exhibido una media del 55% en los dos primeros partidos; quiere el balón. Un alivio para los rojiblancos, siempre más cómodos sin la pelota. Simeone tiene que dar con la tecla en Vigo. Necesario si no quiere llegar al Camp Nou muy descolgado.