Esta España sí ilusiona
Buen juego, dominio total y estupenda aportación de los nuevos ante Bélgica. Silva, de lo mejor junto a Vitolo, hizo doblete en el debut de Lopetegui en el banquillo de la Selección.Alemania - España: amistoso internacional
España ha iniciado una nueva era con Lopetegui. En Bruselas estuvo más cerca de Sudáfrica que de Brasil. Fue gracias sobre todo a tres jugadores: Silva, Vitolo y Diego Costa. Y gracias también a Sergio Ramos, que renunció a tirar un penalti.
Silva marcó los dos goles de la Selección. Lo hizo jugando en una posición distinta a la que le encomendaban antes. Ha dejado la banda, que está muy bien ocupada por Carvajal y Vitolo, y ha vuelto a la zona que ocupa en su equipo, el Manchester City. Ahí fue letal. No sólo por los goles, también por su capacidad para generar juego.
Parte de ese mérito se lo tiene que agradecer a Busquets y a Koke, que mezclan bien como pareja de medios centros. El otro detalle de Silva es que, desde anoche, queda bautizado como uno de los lanzadores de penaltis de la Selección. Justo antes de esa jugada nos había quedado la duda. Porque Sergio Ramos le guindó al canario una falta más propicia para él. Luego llegó el penalti a Vitolo, y ahí no se dejó convencer Silva, aunque Diego Costa se lo pidió. El hispano-brasileño fue otro de los destacados. Mejoró España con él. Porque le da profundidad y mordiente a La Roja. Diego Costa está más hecho a jugar sólo ante el peligro, frente a dos y a veces tres centrales. Morata no tanto. Morata juega en el Madrid, y ahí los huecos se multiplican. De todos modos, anoche Morata no tuvo tiempo para nada. Antes de la media hora se tuvo que ir con una lesión muscular. Será difícil que pueda jugar en León el lunes. Lo hará Diego Costa, que dejó cositas interesantes. Sólo le falta el gol. Bueno, como siempre.
Antes de Vitolo y Carvajal, la banda izquierda de España era la más activa. Por ahí entraba mucho y bien Jordi Alba. Pero ahora la banda dominante es la derecha. Porque Vitolo y Carvajal son incansables. El sevillista, al que ya probó Del Bosque, nunca defrauda con la Selección. Se está ganando el puesto. El problema para Lopetegui será cuando regrese Iniesta. Pero puede que el que pague el pato sea Thiago, al menos de momento. Porque la idea está clara: Lopetegui quiere usar más las bandas.
España jugó bien, muy bien por momentos. Lo hizo sobre todo en el último cuarto de hora de la primera parte y en la primera media hora de la segunda. Bélgica lo puso fácil. Pese a su calidad es un equipo lánguido, con mandíbula de cristal. Tiene mucho trabajo su nuevo seleccionador, el español Bob Martínez. El caso es que los once titulares belgas juegan en grandes equipos de Europa. Pero De Bruyne es menos con Bélgica que con el City, Carrasco que con el Atleti, Hazard que con el Chelsea o que Witsel con el Zenit. Por separado son estupendos, pero todos juntos son un mejunje. Como esas guarderías donde por separado sólo ves ángeles y cuando se juntan todos sólo ves un demonio.