Los canteranos tiran de un Leganés que convenció
Los pepineros mejoraron su imagen con respecto a la primera prueba. Avilés y Sáiz dejaron los detalles de la noche. Gabriel se retiró con molestias.
El Leganés se llevó su segundo amistoso de la pretemporada y lo hizo, paradójicamente, dando mejor imagen tras la reanudación, cuando la alineación pepinera apareció trufada de chavales del filial de Tercera.
Antes, con un equipo más titular (Garitano alineó a tres canteranos por las lesiones de Szymanowski, Insua, Timor y Bustinza), al flamante recién ascendido a Primera le costó dominar a un rival lleno de viejos conocidos en sus filas. A saber, Carlos Álvarez, Paco Candela, Dioni y Velasco. Precisamente Velasco, gozó de la mejor ocasión del partido antes de que Gabriel abriera la cuenta con un latigazo desde la frontal tras regate temerario de Brignoli en su propia área.
Ambas acciones (el disparo y la filigrana) fueron aplaudidas con pasión por una afición leganenses que invadió el Fernando Torres. Garitano, sin embargo, no estaba de acuerdo con su público. A Brignoli le cayó la bronca de la noche porque al de Bergara no le gustó en absoluto se atreviera a dejar contrarios atrás dentro del área pequeña.
La primera mitad murió sin mucho más que relatar. La segunda, sin embargo, inició rápida y eléctrica. Una buena combinación entrar Toni y Avilés acabó con el gol de éste último. El Fuenlabrada reaccionó al tanto con minutos de calidad que cristalizaron en el 1-2 de Iribas. Sucedió de estrategia en una falta lateral. Tampoco eso le gustó a Garitano. Menos mal que Sáiz le tranquilizó con el gol de la noche. Pegado a la cal izquierda, el canterano fue dejando atrás rivales hasta batir la meta azulona. Golazo.
Tras la jugada no hubo más que contar de un partido que, eso sí, dejó un susto en forma de lesión. Gabriel se marchó con molestias en su rodilla izquierda fruto de un golpe fortuito. El brasileño dejó el Torres cojeando ostensiblemente y luciendo una aparatosa rodillera llena de hielo.
