Los ejercicios del Profe Ortega: exigencia no exenta de riesgos
La lesión de Borja, accidente entre sesiones durísimas. El preparador físico del Atlético diseña una pretemporada de tronío para aguantar el curso.
La exigencia del Profe Ortega tiene dos fotos en las dos últimas pretemporadas, Vietto, el año pasado, y Mensah, éste, ambos exhaustos el primer día, sin aire. Pero es que siempre, con el preparador físico, se trabaja a tope, buscando los límites, al máximo. Gomas elásticas con pesas, bosus y hasta cintas para trabajar el equilibrio, a lo funambulista, forman parte de su metodología y, a veces, pueden conllevar riesgos, como ocurrió el jueves en San Rafael, cuando se lesionó Bastón (que ayer recibió el alta médica).
El canterano hacía un ejercicio con una goma elástica sujeta al suelo por una piqueta cuando ésta se soltó e impactó en el brazo del futbolista. La piqueta le provocó un enorme corte en el antebrazo izquierdo. El muelle, y la goma, en el impacto le quebraron el cúbito del brazo. Las pruebas en Madrid dictaminaron que sufría una fractura oblicua de tercio distal que le obligó a pasar por el quirófano a primera hora de la tarde en la Clínica Fremad de Majadahonda. Operación que puede acortar los plazos de baja de este tipo de lesiones, que suelen rondar los dos meses de ausencia.
Borja había regresado al Atlético después de brillar en su año de cesión en el Eibar, en su primera temporada en Primera, donde marcó 18 goles. Ahora estudiaba las diversas opciones del mercado. Muchos equipos en España y en Inglaterra le querían. Bastón está cerca de la Premier, con un equipo dispuesto a abonar 20 millones por su fichaje. Algo que esta infortunada lesión puede frenar. El accidente fue fortuito, pero, por si acaso, cuando la sesión del Atlético continuó mientras los servicios médicos atendían a Borja, dos miembros del cuerpo técnico pisaban las piquetas de la goma elástica para que esta no volviera a soltarse e impactar en otro de sus jugadores.
