El 'caso Rulli' se acerca a su fin
El Manchester City ejerce la cláusula para fichar al portero argentino, y se intercambia la documentación necesaria con la Real Sociedad para cederlo la próxima temporada
El 'caso Rulli' se reactiva, y parece que esta vez puede ser la definitiva. Aunque visto lo visto, nunca se puede decir eso con este asunto. Pero lo cierto es que después de unos días de indefinición y de dudas, da la sensación de que el fichaje de Gero Rulli por la Real Sociedad puede estar viviendo uno de sus últimos capítulos para terminar convirtiéndose, por fin, en una realidad. La fórmula con la que el meta argentino recalará en San Sebastián en propiedad no será la esperada por todos, pero permitirá que termine fichando en propiedad por la Real, que es lo que cuenta, al fin y al cabo.
El primer paso era que la Real Sociedad negociara con el Manchester City la forma para que Rulli acabe convirtiéndose en jugador en propiedad de la entidad txuri-urdin. Y eso parece que está. Ya hay acuerdo entre ambos clubes, según fuentes consultadas por la Cadena SER. El siguiente paso que retrasaba el acuerdo definitivo era que el club inglés pudiera ejecutar la opción que tenía sobre Rulli para ficharlo en propiedad. Y esa opción ya la ha ejecutado. Desde ese momento, y con el acuerdo entre ambas partes ya cerrado, ambas entidades se intercambian ya toda la documentación necesaria para poder cerrar la operación. El Manchester City dejaría cedido a Rulli en la Real la próxima temporada, y a partir de ahí del próximo año, el club donostiarra tendría la obligación de ficharlo en propiedad por unos 7 millones de euros, porque se incluiría una cláusula en el contra de compra obligatoria. Parece que la Real podrá tener en propiedad a Rulli como mínimo hasta 2018, durante otra temporada más, y a partir de ahí el City puede recuperarlo abonando una cantidad al club txuri-urdin, que podría ser del doble de lo que le pagará la Real.
El contrato de Rulli en la Real sufrirá, por tanto, algunas variaciones. Por eso razón, su representante, Facundo Fraga, tiene previsto viajar esta semana a San Sebastián para revisarlo y volverlo a cambiar. Porque hay que recordar que Rulli se marchó de Donostia la última vez con el contrato que iba a tener en la Real firmado, pero hay que cambiarlo, porque estará un año a préstamo por el City, que tendrá el 30% de sus derechos federativos.
A partir de ahí, la duración de su fichaje por la Real será la misma que había apalabrado con Rulli, hasta 2022, pero el City podrá llevárselo siempre que quiera (y que el jugador esté de acuerdo) desde junio 2018 sin tener que abonar su cláusula de rescisión, que será de 40 millones de euros, como la de Mikel Oyarzabal. El club inglés tendrá siempre preferencia para ficharlo por una cantidad más baja en caso de que un club quiera abonar esa cláusula. En caso de futuro traspaso, por la cantidad de su claúsula o no, el 70% de su futuro pase sería para la Real y el 30% para el City.