El Suiza-Albania que cierra el grupo A mañana en Lens será especial para muchos suizos con raíces albanesas o directamente nacidos allí. También para varios de sus jugadores, hasta seis, que fueron criados en el país helvético pero vinieron al mundo en Albania. Sin embargo, si para alguien será un choque distinto y emotivo será para los Xhaka. Por primera vez en la historia de la Eurocopa dos hermanos se enfrentarán con selecciones diferentes. Granit lo hará con Suiza; Taulant, con Albania. Hasta ahora el caso más parecido fue en el Mundial entre los Boateng, Jerome y Kevin.
Los Xhaka nacieron en Basilea. Su familia es originaria de Kosovo y llegó a Suiza al igual que muchas otras entre finales de los 80 y principios de los 90, cuando se produjo un éxodo muy grande de albaneses. Comenzaron a destacar en el Concordia y después recalaron, siempre de la mano, en el Basilea. También en categorías inferiores de Suiza hicieron un camino paralelo, siendo Granit un año más joven.
El destino de ambos se separó en 2013, sin embargo. Ante la falta de oportunidades con la absoluta suiza, Taulant decidió aceptar la proposición de la federación albanesa y jugar con el país de su familia. En ese momento surgió la posibilidad de que se produjera lo que va a acontecer mañana en Lens. Un Suiza contra Albania. Un Xhaka contra Xhaka. La vida y sus vueltas.