Los nuevos dueños del Granada tienen mucho trabajo por delante. Media Base Sport (MBS), empresa intermediaria en la operación de compraventa y encargada de diseñar la nueva estructura del club y la nueva plantilla, tiene sobre la mesa casi una hoja en blanco. Entre los jugadores que permanecían cedidos y vuelven a sus clubes de procedencia y los que Pozzo se lleva consigo al tratarse de futbolistas de su propiedad, la plantilla del Granada cuenta en este momento con solo once futbolistas. Ni más ni menos. Once futbolistas de los 25 del primer equipo no suponen ni la mitad, por lo que los nuevos responsables de la parcela deportiva podrán completar un vestuario a su medida en función, claro está, de sus posibilidades económicas que no van a ser escasas.
Los once futbolistas que tienen contrato en vigor con el Granada son los defensas David Lombán, Jean Sylvan Babin y Ricardo Costa; los centrocampistas Fran Rico, Javi Márquez, Rubén Pérez y Rene Krhin; y los atacantes Edgar Mendes, Isaac Cuenca y David Barral. Los dos únicos que finalizan contrato con el Granada son Jesús Ferández y Mainz. El resto de futbolistas regresan a los clubes a los que pertenecen tras el periodo de préstamo. Son los porteros Kelava (Udinese), Dimitrievski (Udinese) y Andrés Fernández (Oporto); los defensores Miguel Lopes (Sporting de Lisboa), Doria (Olimpique), Biraghi (Inter de Milán) y Salva Ruiz (Valencia); los centrocampistas Doucouré (Watford) y Robert Ibáñez (Valencia); y el delantero Peñaranda (Watford). A esto hay que sumar los futbolistas propiedad de una empresa de Gino Pozzo que, aunque estaban inscritos en el Granada, volarán junto a su propietario, caso de Foulquier, Uche, El Arabi y Success.
Está claro que el Granada se puede reforzar en todas las líneas. Especialmente en la portería y en la delantera está todo por hacer. La zona del centro del campo, con jugadores de la importancia de Rubén Pérez, Krhin o Fran Rico es la mejor armada antes del desembarco de los nuevos propietarios.