LAS DIEZ COPAS DE EUROPA DEL REAL MADRID
La cuarta: Di Stéfano vuelve a ganar ante el Stade de Reims
Un gol del delantero madridista dio la victoria al Madrid ante el Stade de Reims, que buscaba la venganza tras la derrota en la final del 55.
La cuarta edición de la Copa de Europa confirmaría el domino del fútbol por parte del Real Madrid durante la década de los 50. Como en la anterior edición, España volvía a aportar dos equipos a la competición, el Real Madrid, vigente campeón de Europa y de la Liga Española y el Atlético de Madrid, que quedó segundo en la campaña anterior y ocupaba la plaza de campeón de su vecino de la Castellana. Si España era la pasada edición el primer país que metía dos equipos, esta vez sería Madrid, la primera ciudad de Europa que conseguía meter a dos equipos en la máxima competición continental.
Además, se incluirían dos nuevas federaciones, la finlandesa y la turca. El HPS Helsinki y el Besiktas entrarían en los octavos de final aunque ambos caerían en esta misma ronda.
El Real Madrid empezó su viaje esta temporada ante el Besiktas. En el Bernabéu, un gol de Santiesteban y otro de Kopa en el 90 dejarían encarrilada la eliminatoria pero las malas noticias llegaron con la expulsión de Alfredo Di Stéfano, que no pudo participar en el partido de vuelta aunque eso no supuso un problema para los merengues que empataron a uno (gol de Santisteban para el Madrid y de Kaya Köstepen para el Besiktas) y se metieron en la siguiente ronda.
En cuartos de final, el Wiener no fue un rival mucho más complicado que el anterior. A pesar del empate a cero en el Praterstadium (ahora, Ernst Happel de Viena) el Madrid sentenció en la vuelta con un 7-1. Mateos abría el marcador del Bernabéu pero Horak metería el miedo en el cuerpo con el gol del empate en el minuto 14. A partir de ahí, la delantera blanca se desató y anotó los seis goles restantes, Di Stéfano marcó cuatro, Rial uno y Gento el último del partido en el minuto 89. En el otro brazo del cuadro, el Atlético de Madrid empataba con el Schalke 04 y se metía en cuartos contra el eterno rival.
El partido de ida se disputó al norte de Madrid, en el Santiago Bernabéu. Un 2-1 en un partido complicado para ambos que se acabó en poco más de media hora. En el minuto 13, Chuzo abría el marcador y a los dos minutos empataría Rial. En el 33, Puskas anotó de penalti y todo se dejó pendiente para el partido en el Metropolitano.
En el estadio rojiblanco, Collar marcó y dejó todo avocado al partido de desempate, que se celebró en La Romareda, por la norma de UEFA de celebrarlo en terreno neutral. Di Stéfano abrió el marcador en el minuto 16 y Collar empató a los dos minutos. El húngaro Puskas anotó en el 42 y clasificó al Madrid para la cuarta final de su historia. El Stade de Reims, que eliminó a Helsinki, Standard de Lieja y Young Boys, tendría una oportunidad de revancha contra los blancos y además tenían a Just Fontaine, uno de los delanteros más peligrosos de la competición que quedaría máximo goleador (10 dianas que superaban las 8 de Vava y las 6 de Di Stéfano).
La final se celebró el 3 de junio de 1959 en el Neckarstadion de Stuttgart frente a 80.000 espectadores. El encuentro se puso de cara para los blancos rápidamente cuando Enrique Mateos en el minuto 2 superaba por velocidad a Michel Leblond y definía al palo derecho de la meta de Dominique Colonna. El segundo fue también en el minuto dos, pero de la segunda mitad. La Saeta Rubia recibía cerca del área y controlaba perfecto, se preparaba el disparo y batía con un potente derechazo al meta galo para seguir alargando la leyenda del Madrid en el viejo continente.
