El récord negativo de Cornellà está en juego contra el Eibar
El mínimo de espectadores en Liga está fijado en 12.650, ante el Villarreal en la 2013-14. La peor entrada de la era Galca fue en el peor partido: ante la Real Sociedad.
Acabar decimosegundos (y no decimosextos) y percibir 50 millones del reparto televisivo en lugar de 48. Son las dos primeras motivaciones del Espanyol en su cierre de temporada, este domingo, ante el Eibar. Pero no las únicas. El último encuentro en Cornellà puede entrar en la historia como una de las peores entradas —si no la peor en Liga— en los siete años de vida del actual estadio perico.
El récord liguero en negativo está fijado en 12.650 espectadores, los que se congregaron en la visita del Villarreal el 24 de febrero de 2014, seguido muy de cerca por los 12.710 ante el Celta, el 17 de enero de 2015, y de los 12.723 en el Espanyol-Levante del 28 de noviembre de 2014. El cuarto partido con menos afluencia en Cornellà corresponde ya a esta temporada: la visita del Málaga, el sábado 21 de noviembre de 2015, con 13.293 espectadores. Pero aún estaba Sergio González; y, pese al escaso respaldo, ganaron por 2-0.
Desde que Constantin Galca es el entrenador, en dos ocasiones bajaron la barrera psicológica de los 15.000: ante el Celta, el pasado 19 de abril (14.227) y contra la Real Sociedad, al que acudieron 14.155 valientes. La peor entrada con el rumano coincide, casualmente o no, con el peor partido de su equipo: aquel terrorífico 0-5 del 8 de febrero. A la plantilla le toca ahora maquillar la imagen en la jornada final.
