Zidane camina hacia la Liga por la senda que siguió Molowny
En la temporada 1977-78, el canario fue el último técnico que conquistó el título con el Real Madrid haciéndose cargo del equipo a mitad de temporada.
Zidane tiene las estadísticas en contra para conquistar el título de Liga en esta última jornada. Si fuera poco con derribar el muro que impide al Real Madrid cantar el alirón sin llegar líder a la última jornada, el técnico francés debe lograr un hito muy extraño en la historia de la Liga: proclamarse campeón haciéndose cargo del equipo a mitad de temporada.
Sólo cinco entrenadores lo han coseguido en más de ochenta años de historia de la Liga. Los dos últimos lo lograron precisamente dirigiendo Real Madrid. El precedente más reciente en el que puede mirarse Zidane recae sobre Luis Molowny. El canario se hizo cargo del equipo en la segunda jornada de la temporada 1977-1978. La continuidad de Miljanic —el Real Madrid había finalizado noveno la Liga anterior— fue muy discutida por los socios compromisarios en la Asamblea previa al inicio de la temporada y la derrota (2-1) en Salamanca en el debut liguero precipitó la destitución del técnico balcánico.
A Molowny apenas le bastaron seis jornadas, con otras tantas victorias consecutivas, para aúpar al Real Madrid a un liderato que sólo cedió en la octava cita del campeonato tras perder en Vallecas ante el debutante Rayo matagigantes.
El Real Madrid ya había conquistado una Liga en otra ocasión tras un cambio de entrenador. Fue en la temporada 1954-1955. A pesar de marchar líder, la mala relación de Enrique Fernández con el secretario técnico Juan Antonio Ipiña le costó el puesto al técnico tras una victoria (0-2) en un amistoso ante el Benfica entre las jornadas 13 y 14. José Villalonga tomó el relevo, mantuvo al equipo en cabeza hasta el final y, en los años siguientes, lo condujo a la conquista de las dos primeras Copas de Europa.
Juande, López Caro, Luxemburgo, Del Bosque, Toshack...
En los últimos 20 años, el Real Madrid ha cambiado de entrenador seis veces en mitad de temporada sin tener siquiera opciones de pelear por el título. El que mantuvo el sueño más vivo fue Juande Ramos. El manchego se hizo cargo del Madrid con el equipo en quinta posición a nueve puntos del Barcelona justo antes del Clásico de la primera vuelta. Perdió ese partido, pero en las 18 jornadas siguientes sólo cedió un empate y, tras recortar ocho puntos, llegó al Clásico decisivo a cuatro del primer Barça de Guardiola.
Sin embargo, tras el histórico 2-6 del Bernabéu el equipó entro en una profunda depresión y se sumió en una espiral de derrotas hasta el final del campeonato. Sólo la relajación del Barça una vez campeón impidió que la diferencia final fuera superior a los nueve puntos que finalmente separaron a los eternos rivales.
Zidane cogió al Real Madrid a cinco puntos del Barça y, tras un inicio dubitativo, la brecha llegó a aumentar a doce puntos de diferencia. Sin embargo, en la recta final ha conseguido recortar once puntos tras otros tantos triunfos seguiros. ¿Conseguirá el francés culminar la proeza?
