El Carabanchel festejó su Centenario entre amigos

Fue una fiesta de cumpleaños a lo grande, porque la ocasión bien lo merecía. El Carabanchel celebra sus 100 años de vida, el tercer club de la Comunidad en llegar tras Real Madrid y Atlético, y en su gala del Centenario se vio arropado por mucha de la gente que le ha acompañado en su ya larga historia y por personalidades que quisieron felicitarlo en persona. En el repleto colegio San Gabriel estuvieron Del Bosque y Butragueño, compartiendo recuerdos propios en La Mina. También el Mono Burgos, directo desde el entrenamiento del Atlético y agradecido al club en el que debutó como técnico en solitario. Uno tras otro, llovieron las buenas palabras en un emotivo acto que señaló al Cara como uno de los equipos más queridos del fútbol modesto.

Las instituciones fueron las primeras en aplaudir los 100 años del Carabanchel. Vicente Temprado, presidente de la Federación madrileña y representante ayer de la Española —Villar se ausentó, pero se comprometió a hacer una visita y un regalo—, reconoció que era un día feliz: “Este aniversario tiene un calado especial. Ésta es una historia que no cesa y quien llegue al club sabe que tiene una responsabilidad”. Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid, y Cristina Cifuentes, presidenta de la Comunidad, ésta con la camiseta del Cara puesta (“soy carabanchelera”), felicitaron al club y agradecieron todos los esfuerzos en sendos vídeos.

En un día señalado, el Cara tuvo un detalle con sus clubes vecinos, “rivales pero amigos”. También con Real Madrid y Atlético, los únicos más veteranos que él en la Comunidad. Butragueño entregó a Juan Medina, presidente del Carabanchel, una réplica del Bernabéu: “En La Mina perdí yo con el Madrid C. Hoy toca felicitar al club y a su afición y dar la gracias porque muchos niños puedan jugar aquí”. Para Germán Burgos, el Carabanchel representa una etapa muy especial en su carrera: “En mi corazón aún late esta cruz. Acá dejé una parte de mí. Me dieron a cargo el equipo (2010) y nos divertimos”.

Homenajes.El club honró también a aquellos que le han traído en volandas hasta hoy: presidentes, entrenadores, jugadores y socios históricos. Felines, uno de los más aclamados y queridos, enganchó al público con sus anécdotas y su efusividad: “Llegué y no tenía dinero ni para pagarme las fotos. Aquí fui muy feliz. Conocí gente maravillosa”. Y hablando de futbolistas, uno de los momentos más emotivos del acto fue el homenaje a Carlos Matallanas, con un vídeo con imágenes suyas, acompañadas por el tema Maneras de Vivir, del carabanchelero Rosendo, y un sentido lema: “Gracias, Mata. Uno de los nuestros…”.

Uno de los cumplidos que  más llenan de orgullo en Carabanchel es el de Del Bosque, desde ayer socio de honor. “Mi primer partido ofi cial con el Madrid, en la 68-69, lo jugué en La Mina. Era un lujo este campo. Tengo grandes recuerdos. Con las dificultades que pasa el fútbol base tiene mucho mérito”.

Juan Medina, emocionado presidente, destacó el orgullo del barrio, su barrio, y lanzó un deseo: “Pido para el Cara cien años más”. Y a otro carabanchelero como Petón le rebosaba el orgullo: “No es éste un sitio de paso para jugar en La Mina y salir en el periódico. Es una escuela de generosidad, de lealtad. Gracias al Carabanchel soy mejor de lo que hubiera sido. Es el latido de un barrio. Por siempre: ¡aúpa Cara!”. Y el auditorio se vino abajo. Feliz y orgulloso, el Carabanchel festejó entre amigos cien años que han dado para mucho...