Abraham: “Firmo ganar aunque me abran otra vez la cabeza”
El centrocampista cuenta por lesiones sus dos Espanyol-Atlético. “El Atlético siempre se nos ha dado bien en casa, aunque a mí no tanto por motivos obvios".
Casi tantos puntos, dos, se llevó Abraham González de su primer Espanyol-Atlético en Cornellà, el 19 de octubre de 2013, como el conjunto perico, que sumó tres, al vencer por 1-0. Con la salvedad de que los del centrocampista fueron de sutura, en el pómulo derecho, donde le cabeceó por error Mario Suárez. Peor le fue el 14 de marzo de 2015, en su segunda oportunidad—o ‘round’, visto lo visto—, ya que Abraham fue objeto de un codazo de Miranda por el que el atlético fue expulsado y el blanquiazul, enviado al hospital con un traumatismo craneoencefálico. Hoy recibe por tercera vez al Atleti en Cornellà y tiene claro cuál es su suerte.
“Firmo ahora mismo ganar aunque me vuelvan a abrir la cabeza”, asegura Abraham a AS, con absoluta naturalidad. “El Atlético siempre se nos ha dado bien en casa, aunque a mí no tanto por motivos obvios, por lo que es el partido perfecto para salvarnos”, añade. No en vano, echan cuentas en el vestuario perico y saben que, con una victoria contra los colchoneros, sumarían 39 puntos que les mantendrían en Primera salvo debacle. El descenso está ahora fijado en 28.
Así que no es de extrañar el ánimo del centrocampista, quien apostilla, ahora ya en tono de broma: “Tendré que salir a jugar con casco”.
Los pericos aún no han perdido con el 4-1-4-1
Todo apunta a que Constantin Galca regresará esta tarde al 4-1-4-1 que tantas alegrías está brindando últimamente al Espanyol, con el famoso ‘trivote’ del que Abraham es parte trascendental junto a Víctor Sánchez y por delante de Pape Diop (autor de los dos últimos tantos pericos, en sendos goles de estrategia). El mediocampista catalán admite que ese esquema “ha sido un cambio clave, porque nos ha dado la consistencia que nos venía haciendo falta durante toda la Liga”. No en vano, Galca empezó a emplear el 4-1-4-1 hace siete jornadas, en el Espanyol-Deportivo (1-0). Venía el conjunto blanquiazul de sumar dos puntos de los anteriores 21 y, desde entonces, acumula 14 de otros tantos posibles. Con el añadido de que la única derrota en este periodo, 0-3 contra el Betis, se produjo justo el único día en que el técnico rumano renunció a ese dibujo casi infalible.