Pulso entre Eibar y Villarreal, dos ejemplos del fútbol español

Mucha gente, la inmensa mayoría, cree que el fútbol está diseñado a medida para los grandes. Y no va desencaminada. Por fortuna, hay excepciones. Esas historias embellecen este deporte. De lo contrario, se perdería bastante emoción. Visto su funcionamiento, con las enormes diferencias económicas existentes entre unos u otros, que localidades donde apenas viven 27.000 y 50.000 personas se hayan ganado un hueco en la selecta élite es, cuando menos, meritorio. El grado de valor ya lo decide cada cual.

El Villarreal cumple dieciséis campañas en Primera, un adolescente rodeado de mayores. Compite sin complejos y con éxito. Hoy se planta en Ipurua como el gran candidato a la Champions, al primer puesto de la otra Liga (sigue el partido en directo con AS.com).

La aventura por las alturas del Eibar comenzó hace poco. Un par de cursos atrás estaba en Segunda B. Lo suyo es la humildad, pero ya tiene medio pasaporte para seguir en Primera con sus 37 puntos. Mendilibar y Marcelino dan toques distintos a sus proyectos, pero tienen otra cosa común: juegan compactos, como equipos.

Concentración de peñas armeras

Hoy se celebra la primera concentración de peñas del Eibar con diferentes actividades para calentar motores antes del partido. El club armero ha colaborado en esta iniciativa de Eskozia La Brava y Urko Taldea y en la que se espera la participación de más de un centenar de peñistas. De heho, se ha invitado a alguna del Villarreal, como es el caso de Celtic Submari. Desde las 11:30 horas habrá pinchos (la recaudación irá destinada a fines benéficos) y charanga, foto de familia tras la comida y corteo hasta Ipurua.