Zidane se examina en el Clásico: sus 4 dudas y sus 4 certezas
Tiene claro su once tipo, cuenta con la BBC sana y goleando y apostará por Casemiro. Le preocupa el precedente del derbi, la fatiga por el Virus FIFA y cómo frenar a la MSN...
Zidane se enfrentará este sábado a su primer Clásico como entrenador del Real Madrid. Todo un examen. El galo prepara el envite con una serie de mejoras en su equipo como para ser optimista pero aún hay dudas sobre diferentes aspectos de su sistema y su equipo...
LAS CERTEZAS:
1. Ya dispone de un once tipo.
Se acabaron las semanas de prueba y error. Zidane ya tiene su once con el que ir a por el Barça este sábado y pelear la Undécima. Unir la BBC a Casemiro. Contra el Roma fue el último ensayo y el francés plantó este once: Keylor (en un momento inspiradísimo); Danilo, Ramos, Pepe, Marcelo; Casemiro, Kroos, Modric, James; Bale y Cristiano. En el Clásico sólo hará un retoque: James dejará su puesto a Benzema, que por entonces andaba lesionado.
2. La BBC, sana, engrasada y haciendo goles.
Fue el lamento de Cristiano tras el derbi: “E estamos teniendo muchas lesiones. No quiero menospreciar a nadie, a ningún compañero, pero cuando no están los mejores, Bale, Benzema…”. En Barcelona no habrá ese problema. La BBC ha vuelto al completo tras la reaparición primero de Bale y después de Benzema y ven la portería muy grande: 80 goles en lo que va de temporada (41 de Cristiano, 24 de Benzema y 15 de Bale). En el 4-0 al Sevilla calentaron motores, firmando cada una de las patas del tridente un gol…
3. Enmendará el error de Benítez y Casemiro será el tapón.
El Barça tendrá el balón, parece inevitable. Lidera la posesión en esta Liga con una media del 66,3%, bastante por delante del siguiente… que es el Madrid con el 58,3%. Con Busquets, Iniesta y Rakitic moviendo el balón, Zidane no cometerá el error de Benítez. Casemiro será el rompeolas sobre el que sustentarse antes de que el balón llegue a la MSN culé. Su solidez como pivote resiste la comparativa con Busquets: el brasileño promedia 4,82 recuperaciones por partido con 6,70 pérdidas de promedio mientras que el culé roba 5,62 balones pero pierde 8,77… A Zizou lo tiene ya en el bolsillo con su trabajo incombustible y el galo ha ordenado que tenga un trabajo específico para que supere las molestias en el muslo que sufre. Lo necesita quemando carbón a toda máquina en Barcelona. Y guarda una bola extra: es una amenaza a balón parado.
4. Sin presión por la Liga.
En el vestuario blanco se asume la realidad de las matemáticas, tan tozudas: encaran el Clásico a diez puntos. Perder ante el gran rival nunca es algo que pueda considerarse positivo, pero no penalizaría en lo más práctico porque el título está a una distancia ya casi insalvable. De ganar, en cambio, todo son ventajas: un impulso anímico de enorme valor a cuatro días de medirse al Wolfsburgo en la Champions, la cesta donde el club ha depositado todos sus huevos, y ponerse a siete puntos por si al Barça le da por despeñarse en la Liga.
LAS DUDAS:
1. Más fatiga que el Barça por el Virus FIFA en una zona sensible...
El Madrid aparecerá en la ciudad condal con la mosca tras la oreja: el centro del campo del Barça, donde se cuece y enriquece el poder azulgrana, aparecerá fresco como una rosa. La Selección liberó a Iniesta del doble viaje a Italia y Rumania por unas molestias que ya le impidieron jugar contra el Villarreal pero Busquets sí estuvo en El Madrigal y los médicos de España le eximieron por una fractura en un dedo. Rakitic se libró de jugar con Croacia contra Israel y Hungría por unos pequeños problemas musculares mientras que su seleccionador exprimió a Modric. El madridista, esencial para Zidane, jugó 157’ en total con 72 horas de distancia. Kroos se dio una paliza en el Alemania-Inglaterra (2-3) y este martes tiene otro exigente choque ante Italia. James, una opción alternativa, llegará aún más fatigado tras jugar el pasado viernes a 3.600 metros de altitud en La Paz (Bolivia). Las piernas descansadas serán las del equipo azulgrana…
2. El mal precedente del derbi.
Zidane sólo ha tenido un partido de máxima envergadura hasta ahora y fue el derbi del Bernabéu en el que su Madrid fue maniatado sin excesivos problemas por el Atlético. Y se vio superado en el plano físico. Aunque el Barça juega de manera diametralmente distinta al Atlético, Simeone dio una masterclass de cómo desarbolar tácticamente a Zidane: presión alta, vigilancia continua sobre Modric, líneas muy juntas y Griezmann castigando los lentos repliegues blancos . El Cholo neutralizó al Madrid sin hacer ni una falta. Además, el Madrid sólo ha sumado este curso un punto de 12 jugados hasta ahora ante los equipos actualmente en zona Champions (Barça, Atlético y Villarreal). Los equipos fuertes se le atragantan.
3. Frenar la MSN, un desafío épico.
Si la BBC le da tranquilidad a Zizou, la gran preocupación es su Némesis, la MSN. El tridente de Luis Enrique lleva ¡101 goles! y esta temporada ya han probado la sangre blanca. Con Messi a medio gas en el Bernabéu, Luis Suárez hizo un doblete y Neymar marcó otro en el doloroso 0-4 de la primera vuelta. Ahora el desafío se multiplica en dificultad. El astro argentino comparece entonado, con 10 goles en las últimas ocho jornadas de Liga… Zidane está estrujándose las neuronas para elaborar un plan que neutralice un tsunami con tres rostros.
4. Peligro: desconexiones.
“Jugando como en la segunda parte no vamos a ninguna parte”, confesó Zidane tras el pírrico 1-2 en Gran Canaria. Se tiñó de enfado su habitualmente relajado discurso. Y es que el Madrid desapareció de la isla en esos segundos 45 minutos y hubiera dejado escapar otros dos puntos de no ser por un cabezazo postrero de Casemiro. Llovía sobre mojado. El Madrid ya se mostró demasiado vaporoso en el partido de vuelta contra el Roma. Con 0-0 en el marcador, los de Spalletti perdonaron hasta seis ocasiones en un mal día de Dzeko y con un Salah tan correcaminos como ineficaz. En la retina hay desconexiones ‘menores’, como la mala segunda mitad contra el Deportivo tras el 5-0 de los primeros 45 minutos. Zizou sabe que si sus pupilos se van mentalmente del partido, aunque sea un tramo corto, el Madrid lo puede pagar muy caro.