Roger y Rennella devuelven la ilusión al Real Valladolid

El Valladolid pide paso. Tras ganar al Oviedo, los de Portugal sumaron una nueva victoria ante el Llagostera (3-0) que aguantó 32 minutos hasta que Roger adelantó a los suyos tras una fantástica jugada de velocidad de Mojica, que se aprovechó de un saque rápido de Kepa. El delantero ya había podido adelantar a los suyos antes. En los primeros minutos se encontró un balón perdido a la salida de un córner, pero no acertó a rematarlo a las mallas. El campo estaba muy mojado, muy rápido, lo que beneficiaba a los locales. Mojica tuvo otra clara ocasión antes del descanso, pero su chut se fue muy alto. ¿Y el Llagostera? Desaparecido. No se acercó a Kepa, no tuvo opciones, no probó a una defensa de circunstancias y no disparó a portería. Demostró, al fin y al cabo, porque es el peor equipo de la Liga a domicilio, con dos puntos ganados de 48 posibles.

En la segunda parte, el partido no cambió demasiado. El Valladolid buscaba el gol de la sentencia, pero con un ojo puesto en no dejarse sorprender a su espalda. Oriol fue el que más cerca estuvo, pero su disparo se fue fuera, como el cabezazo de Juanjo. Entonces, Rennella entró más en juego. Creó ocasiones, repartió juego y marcó de córner directo, un gol olímpico un tanto atípico. Se aprovechó de lo mojado que estaba el césped para anotar lanzando el balón al palo más cercano y tuvo la ayuda de René, que no fue capaz de sujetar el balón e introdujo el esférico en la portería. Eso pasó justo después de que Escassi sacara el balón debajo de los palos en la jugada anterior. Samuel también pudo marca a la salida de un córner, pero el balón fue despejado por un defensa. Los de Portugal, al fin y al cabo, tuvieron ocasiones para golear. El francoitaliano pudo anotar en un centro, antes de que lo hiciera a centro de Villar. Con esta victoria, los pucelanos se acercan a la zona de promoción, por los resultados que se han dado, y el Llagostera ve escaparse las opciones de salvación.