Las cinco claves de la victoria del Atlético en el Bernabéu
Rendimiento colectivo, el plan trazado por Simeone, el esfuerzo físico del equipo, el liderazgo de Griezmann y el poderío defensivo.
El Atlético de Madrid venció su séptimo derbi con el argentino Diego Simeone al mando, con su plan táctico, el rendimiento colectivo de todo el equipo, el formidable esfuerzo físico del conjunto, la fortaleza defensiva y el gol del francés Antoine Griezmann como cinco claves para su triunfo en el Santiago Bernabéu.
1. El rendimiento colectivo: En el Atlético el colectivo es la prioridad por encima de cualquier individualidad. Es una cuestión innegociable para Simeone. Su equipo se movió como un bloque compacto, por momentos impenetrable, con cada uno cumpliendo el rol que le otorgó su técnico para el derbi del sábado en el Bernabéu. "Tiene que ser todo un bloque. El primero se mueve y que los otros diez se muevan como el primero", se escucha cada pretemporada en los entrenamientos de Los Angeles de San Rafael. Así funcionó en el derbi. "Fuimos el Atlético de Madrid. Este partido de hoy nos define claramente a nosotros como equipo. Nos representa. Nosotros somos esto y seguiremos intentando mejorar", dijo el sábado Simeone.
2. El plan de Simeone: "El partido que me imaginaba sí era éste (...) Un partido muy pensado y trabajado", explicó el técnico argentino minutos después de concretar su victoria en el derbi. Desde su detallista diseño táctico del encuentro partió el equipo rojiblanco hacia su triunfo en el Santiago Bernabéu. Primero se intuyó una presión más alta, después retrasó algo más sus líneas, mejoró el equipo a partir del minuto 20 y manejó el ritmo cómo quiso y cuando quiso desde entonces hasta el final del encuentro, sin dejar ni una sola vía al potencial ofensivo rival. Su idea trasladada a la perfección al campo por sus futbolistas.
3. El esfuerzo físico: Sólo 65 horas después del final del partido en Eindhoven contra el PSV, comenzó el derbi. En el partido del miércoles, el Atlético corrió 115,677 kilómetros, siete más que su oponente, llegó a las 6:00 horas del jueves a Madrid y sólo tuvo dos entrenamientos, de una hora cada uno, para preparar el duelo. Su rendimiento y esfuerzo físico, con sólo tres cambios en el once respeto a uno y otro partido, fue impresionante en el Santiago Bernabéu, donde corrió mucho más que su rival y terminó exhausto. "Corremos más que nadie. Ha sido una buena paliza", resumió Antoine Griezmann al término del encuentro.
4. El factor Griezmann: El internacional francés fue determinante en el derbi. Situado en la delantera, fuera de la banda en la que ha disputado bastantes encuentros este curso por las necesidades del equipo, se le vio suelto con la pelota desde el primer momento, además de sumamente implicado como siempre en el trabajo defensivo. Suyo fue el primer disparo a portería de su equipo, despejado por Keylor Navas con una estirada, y suyo fue el gol del triunfo, en una jugada encarrilada y culminada por él. Condujo el balón, esperó a la llegada de Filipe Luis, se la entregó y se desmarcó para recibir la vuelta del pase y marcar gol con su perfecta definición de siempre.
5. La fortaleza defensiva: Desde los atacantes, con la presión y la incomodidad para su rival para la salida del balón, hasta su retaguardia, firme como siempre, pasando por el centro del campo, de suma consistencia con la reaparición 28 días después de Augusto Fernández junto a Gabi en el medio centro, la defensa colectiva del Atlético fue imponente y casi insuperable para el Real Madrid. Ni por las bandas ni por el centro encontró su rival apenas ningún resquicio en los 90 minutos para generar ocasiones, además de las pérdidas de balón que provocó el entramado defensivo del Atlético. El esloveno Jan Oblak, su portero, sólo hizo tres paradas, dos centradas a Cristiano Ronaldo y una más difícil a Borja Mayoral.