Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

REAL ZARAGOZA

Más de 700 zaragocistas van a apoyar el domingo en El Sadar

Es el segundo desplazamiento más numeroso de la temporada, tras el de Tarragona. La afición, muy animada tras las última victoria del equipo.

Más de 700 zaragocistas van a apoyar el domingo en El Sadar
Alfonso ReyesDiario AS

La resonante victoria en el Nuevo Arcángel de Córdoba ha devuelto al Real Zaragoza a la pelea por el ascenso y ha reavivado la ilusión en una afición que ya prepara el segundo desplazamiento más numeroso de lo que va de temporada, tras el de Tarragona. Y es que más de 700 seguidores aragoneses acudirán el domingo a Pamplona para arropar al equipo de Lluis Carreras en su intento por lograr un tercer triunfo consecutivo que refuerce todavía más su candidatura y sus posibilidades de regresar a la Primera División.

La Federación de Peñas, en su noveno viaje organizado de esta campaña, ya ha completado sus cuatro autobuses y ha vendido 245 localidades, a las que hay que sumar las 380 que ha puesto el Real Zaragoza a la venta en sus oficinas, al precio único de 25 euros. Y a estos dos paquetes oficiales hay que unir todos los que se desplacen por su cuenta y adquieran sus entradas en las taquillas de El Sadar.

No se llegará a los mil seguidores desplazados hasta Tarragona, pero se superarán los 700. Muchos más que los que fueron el curso pasado a Pamplona —sólo 250, incluidos 50 ‘ligallos’, pese al intento de las dos federaciones de peñas por recuperar la normalidad entre las aficiones—, el día de la polémica suspensión del partido por la nieve.

Hagamos memoria: el Osasuna-Real Zaragoza estaba inicialmente programado para el domingo 1 de febrero de 2015, a las 12:00 horas, pero fue aplazado por una nevada de cinco centímetros y se disputó el martes 10 de febrero (0-1, gol de Ruiz de Galarreta). El Osasuna, al que le faltaban por lesión Oier, Loé y Loties, además de Cedrick y Cadamuro, en la Copa África, y Nekounam, todavía en Teherán, tras haber jugado la Copa Asia con su país, no hizo todo lo posible por proteger el terreno de juego o limpiarlo el mismo domingo por la mañana y media hora antes del comienzo del encuentro, cuando se decretó la suspensión, ni había abierto las puertas de El Sadar. Popovic fue el primero en salir a denunciarlo: “Creo que se hizo muy poco para que se jugara el partido”.

Hay que precisar que el de la temporada pasada fue el segundo Osasuna-Real Zaragoza de la historia suspendido por la nieve. El primero se registró en la campaña 1957-58, cuando 30 centímetros de nieve y hielo sobre el césped de San Juan obligaron a aplazar el 9 de marzo de 1958 el encuentro con más de seis mil zaragocistas llegados hasta la capital navarra en un tren especial y cientos de autobuses y coches particulares. El partido se trasladó el 16 de marzo, aprovechando el parón del calendario por la disputa del Francia-España en París y finalizó con empate a uno.

En cualquier caso, el Osasuna-Zaragoza con nieve de por medio y más recordado fue el que se jugó el miércoles 9 de febrero de 1983, cuando el equipo de Beenhakker dio una verdadera exhibición sobre un manto blanco, con goles de Valdano y Señor (1-2). Una lección excelente que sigue muy viva en la memoria del zaragocismo.