El club opta por la autogestión
El Consejo decide mantener a Galca y confiar en la opinión y la implicación de los jugadores después de la mejora de Valencia.
Javi López se mantenía de cuclillas, con la manos en la cabeza y la mirada fija sobre el césped de Mestalla. Hacía ya un minuto que el árbitro Del Cerro Grande había señalado el final del partido. Un jugador del Valencia se acercó a consolarlo. La fotografía era más propia de la jornada 38 que de la 24, una reflejo de lo que se jugaba la plantilla el sábado en Valencia. El objetivo no era clasificatorio, ni definitivo, pero los jugadores habían apostado por ayudar a Constantin Galca a encontrar esa famosa “tecla” que esta campaña se ha extraviado. Ellos, como ya ocurrió el curso pasado con Sergio González, decidieron respaldarle a tomar decisiones, a cambiar el estilo y acercarse a aquel que inculcó Javier Aguirre —con algún matiz, claro— en la salvación de la campaña 2012-13. A la plantilla le da seguridad esa manera de jugar. El camino en el partido estuvo más despejado, pero no se alcanzó la meta de sumar puntos.
Sin embargo, las conclusiones de la plantilla, de Galca e incluso de Ramon Robert, consejero delegado, y Mao Ye, consejero, fueron similares: el equipo había merecido puntuar, la actitud “mejoró” y el modelo de juego estuvo más acorde con lo que se necesita para salvar la categoría.Por eso mismo, el Consejo mandó un mensaje de “tranquilidad” y decidió mantener al técnico rumano una semana más, apoyado por la plantilla. “Unión”, como reclamó Óscar Perarnau en su despedida como director deportivo. También opinó Ángel Gómez, secretario técnico, que estuvo en Valencia y que asume las funciones de su excompañero. El club espera también la llegada de Chen Yansheng, que se deberá producir esta semana.
El Consejo opta por la autogestión, confiando ciegamente en que los capitanes y el resto de pesos pesados de la plantilla ayuden al técnico y, todos juntos, eviten que el equipo caiga en la zona de descenso.
Los delanteros. Ha vivido el Espanyol pendiente de su agujero en defensa, que le ha costado ser uno de los conjuntos más goleados del campeonato, pero en ataque tampoco están para demasiadas florituras. La trascendencia de sus delanteros no es la de otros cursos. La campaña anterior, sin ir más lejos, el ataque perico (Caicedo, Sergio García, Stuani y Lucas) ya sumaba 26 goles en la Liga. Esta campaña, solo han aportado 14.
El máximo goleador es el ecuatoriano, con seis, seguido muy de cerca por Hernán Pérez, con cinco, llamado a ser también un jugador importante ahora que el Espanyol fia su suerte al contraataque. Gerard Moreno, lesionado un mes y suplente en las últimas semanas, suma tres, mientras que hay otros tres futbolistas de ataque que todavía no se han estrenado. El equipo necesita sus goles para sobrevivir. Se trata de Marco Asensio, Burgui y Mamadou Sylla.
También opinó Ángel Gómez, secretario técnico. Esta semana llegará además Míster Chen para tomar nuevas decisiones.