Último adiós del mundo del fútbol a Manolo Velázquez
El exjugador del Real Madrid fue incinerado en medio del respeto y cariño de su gente y de todo el fútbol. El Barcelona envió una corona de flores.
El mundo del fútbol dio ayer el último adiós a Manuel Velázquez, uno de los futbolistas más emblemáticos en toda la historia del Madrid y que falleció a los 72 años de edad en Fuengirola. La familia del quien fuera el cerebro del Madrid 'ye-yé' (10 veces internacional con España) se encontraba desolada. Su mujer, Margarita Arbós y sus cuatro hijos, Mónica, Eva, Víctor y Lolo, se sintieron reconfortados ante tantas muestras de afecto. “Todo el mundo le quería” destacaban con emoción. Tras la misa funeral, Velázquez fue incinerado. Sus cenizas reposan en el cementerio de Fuengirola.
El Madrid estuvo representado por Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales, quien estuvo acompañado por otras dos leyendas del madridismo, Amancio y Pirri. Otros exjugadores presentes fueron Paco Bonet, Paco Pineda y Salguero. Butragueño glosó la gigantesca figura de Velázquez. “Ganó la sexta Copa de Europa (1966 al Partizán de Belgrado por 2-1) y fue un jugador muy importante que siempre va a estar en nuestro corazón. La historia del club la forjan los futbolistas y él forma parte de una historia muy bonita”. Amancio le elogió de forma sentida: “Era un jugador técnico, puro y muy especial. Hacía llamarla atención. Nosdivertíamos con él”. Y Pirri se emocionó. “Es un día muy triste porque para mí es como si hubiera fallecido un hermano. Dentro del terreno de juego era un jugador fantástico y elegante”.
El Málaga también tuvo un recuerdo para Velázquez ya que jugó dos años cedido en el equipo de La Rosaleda (entre 1963 y 1965), en el segundo de los cuales logró ascender a Primera . Ahí conoció a su mujer, malagueña. Ben Barek, consejero consultivo del Málaga, fue compañero suyo en aquellos años: “Una noticia triste. Era una gran persona”. Y Antonio Benítez, el otro consejero consultivo blanquiazul se refirió a él como “un amigo”.
Todos ellos recordaron también a otras leyendas blancas que también nos han dejado como Grosso y Zoco. Entre las innumerables coronas de flores que llegaron procedentes de entidades y particulares, destacó una en especial, la que envió el Barça en un gesto que fue agradecido por la familia.