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EL PRECENDENTE DEL BARÇA

El Barcelona ganó cinco títulos en su año sin hacer fichajes

La cautelar que concedió la FIFA, clave para protegerse de la sación. Zubizarreta se gastó en un año el presupuesto de dos mercados. El Barça despreció las señales de aviso.

La sanción al equipo barcelonista no afectó al primer equipo, que arrasó en títulos.
La sanción al equipo barcelonista no afectó al primer equipo, que arrasó en títulos.Fernando Zueras
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Déjà vu. Las primeras reacciones del Real Madrid y el Atlético de Madrid a la sanción de un año (o dos ventanas sin fichar) por parte de la FIFA retrotraen al barcelonismo a la paramnesia de reconocimiento de lo vivido anteriormente. Los argumentos de “esto es un escándalo, un abuso”; “nosotros no traficamos con niños” o “llegaremos a las últimas consecuencias” y “nos defenderemos” son exactamente iguales a los que utilizó el Barcelona cuando sacó la famosa pancarta en el Camp Nou de “La Masia no se toca”. Ya se puede patalear, que cuando la FIFA pesca, no devuelve el pez al estanque.

Dejación de funciones. El Barça, como los clubes madrileños, vivió un tiempo peligroso en la negación. O si se prefiere, en la dejación de funciones. En febrero del 2013, la FIFA solicitó información al Barcelona sobre seis menores y Sandro Rosell, entonces presidente del club se aferró a su política de ‘black box’. Esto es ocultar a la junta los temas importantes y tratarlos únicamente en su círculo de confianza. Rosell confió en el argumento de “esto lo arreglo yo con Blatter tomando un café” y cuando quisieron darse cuenta de la magnitud de la tragedia, era demasiado tarde. Lo mismo le ha pasado al Madrid con el agravante de saber lo que aconteció en el equipo blaugrana, que fue ninguneado por la maquinaria burocrática de la FIFA.

La hora de recurrir. Con la sanción calentita y sobre el plato, llegaba el momento de que los directivos cedieran el protagonismo a los abogados. Se recurrió a Apelación de la FIFA, que es como protestarle al panadero, pero que es el trámite obligatorio para poder llegar al TAS de Lausana. Ahí es donde el Barcelona logró su pequeño triunfo en abril del 2014 cuando consiguió una suspensión cautelar de la sanción. Es decir, le aplazaban la ejecución de la sanción hasta el dictamen del TAS, por lo que podían fichar en verano del 2014.

Llenar la despensa. Ese verano, el Barcelona fichó llenando la despensa para cuando llegara el invierno y se hiciera efectiva la sanción. Se incorporaron a la entidad siete fichajes (Ter Stegen, Bravo, Mathieu, Vermaelen, Rakitic, Suárez y Douglas) más el retorno del cedido Rafinha y subieron al primer equipo Sandro, Munir y Halilovic. Once jugadores.

Una buena base. Esos fichajes ayudaron a que el equipo que no pudo reforzarse ni en el mercado invernal de la 14-15 ni en el estival de la 15-16 ganara cinco títulos entre ambos cursos, pero la clave de los éxitos hay que atribuirla a la base consolidada que estaba ya en la plantilla: Messi, Neymar, Iniesta, Piqué Busquets etc...

Daños colaterales. El éxito en el primer equipo fue rotundo y se demostró que la sanción no afectó tanto. La planificación de Zubizarreta, que fue despedido, dio resultado. Pero el peaje se pagó, y se paga, en el fútbol base. El Barcelona B bajó a Segunda B y empeoraron resultados en muchas categorías.