25 años del primer asesinato en el fútbol español: Rouquier

Este miércoles se cumplen 25 años de un triste suceso, el de la primera víctima mortal en el fútbol español. El 13 de enero de 1991, y tras la disputa de un Espanyol-Sporting de Gijón (0-2), cinco miembros del colectivo Boixos Nois asesinaba en las inmediaciones de Sarrià a Fréderic François Rouquier, de 20 años, y hería a José María Arbolés, de 16, ambos seguidores del Espanyol.

“Le he clavado el machete hasta el mango”, fue una de las frases más impactantes que se escucharon durante la instrucción judicial y la emitió uno de los Boixos, que fueron detenidos dos días después de los hechos y a quienes desde un primer momento se recluyó en régimen de prisión incondicional. El superviviente de la agresión los identificó, y cuatro de ellos admitieron su incriminación durante la reconstrucción judicial que se llevó a cabo. Además de conmocionar al mundo del fútbol, la violenta reyerta estremeció por la proximidad del derbi, que debía disputarse en Sarrià el siguiente 27 de enero. Afortunadamente, no hubo que lamentar incidentes.

La Audiencia de Barcelona dictaba sentencia en 1994, condenando a los autores a una suma de 76 años de prisión por homicidio y lesiones. El caso se trasladó al Tribunal Supremo, donde dos años más tarde la sentencia se elevó a asesinato con alevosía, por lo que las penas ascendieron a 140 años de cárcel, entre los cinco.

Sin embargo, los condenados disfrutaban ya en 1998 del tercer grado. Y en 2003 se volvió a tener noticias de uno de ellos, cuando agredió a dos marroquíes tras la disputa de un trofeo Joan Gamper en el Camp Nou. Otro de los condenados por el asesinato de Rouquier, conocido como Jaro, volvió igualmente a la primera plana, en 2009, cuando se convirtió de nuevo en noticia por ser uno de los detenidos en la operación Valkiria, destinada a desarticular la banda Ángeles del Infierno.