Uno por uno: Griezmann y Vietto conectan, Carrasco luce
Los dos delanteros titulares fabricaron el primer gol en una acción de precisión suiza; Carrasco se reivindica y rompió al Celta a la contra. Augusto, correcto.
Oblak: no tuvo que lidiar con apenas ocasiones del Celta en la primera parte; un centro lateral complicado que despejó de un puñetazo fue su mayor aportación. Buena mano a Bongonda en la segunda parte y enorme seguridad por alto.
Juanfran: el dibujo del Atlético, con Koke por dentro y Saúl volcado a la izquierda, le otorgó toda la banda para que subiese cuanto quisiese. Se asomó mucho al campo contrario, aunque sin ganar línea de fondo todo lo que pudo.
Giménez: en los primeros minutos tuvo que lidiar junto a Godín con un Celta pujante que cortocircuitó al Atleti. El poderío físico de ambos ayudó. Cuando el equipo rojiblanco comenzó a dominar vivió mucho más plácidamente, sólo ocupado en que Aspas no se soltase en exceso a su espalda.
Godín: como siempre, imperial en las marcas cuando el equipo sufría y luego tranquilo para señalar su territorio. Se llevó una fuerte entrada de Pablo Hernández en la segunda parte que pudo hacerle daño.
Filipe: con muchos hombres en su camino, sufrió para llegar a línea de fondo sin apenas espacios. Una brusca entrada sobre Pablo Hernández le costó la amarilla. Sigue buscando su mejor estado; mientras tanto cuaja actuaciones correctas tanto en ataque como en defensa.
Saúl: muy activo por el flanco izquierdo, combinando con Filipe y Koke para ganar línea de fondo. El interior es su sitio y ahí rinde de verdad. Le faltó suerte en el último pase durante la primera parte para hacerse notar más. Tras el cambio de Augusto retrasó su posición para dar fluidez al juego.
Gabi: peleando mucho en la presión y volcándose en ataque por el costado derecho, aunque sin mucha profundidad. El cambio de Augusto le llevó a desenvolverse una vez más de 5, con Koke y Saúl por delante de él.
Augusto: comenzó alineado con Gabi, pero mediado el primer tiempo Simeone le ubicó de 5, en el puesto del lesionado Tiago. Es su sitio, donde domina el juego con su sentido táctico y con la seguridad de sus pases. Pitos y aplausos para él de la que era su afición hace apenas 10 días. Dejó el sitio a Carrasco en el 55’.
Koke: el más fino de los medios rojiblancos, jugando por dentro como siempre ha deseado Simeone (aunque él no lo viese tan claro). Combinó con todos, por delante y detrás de él, y otorgó sentido al Atlético cuando tomó la batuta. De sus botas nació el 0-1. Luego retrasó un poco su sitio para dar fluidez y contención a la medular.
Griezmann: rápido en las arrancadas, suya fue la mejor ocasión del Atlético en la primera parte, con un zurdazo que salió alto. Cuando el equipo domina, puede hacer un buen tándem con Vietto, ambos delanteros eléctricos; el primer gol es buena muestra de eso: se apoyó en el argentino, éste devolvió al segundo palo y el francés la mandó a la red. Se marchó en el 83’, dando entrada a Gámez.
Vietto: muy insistente a la hora de recibir, girarse y encarar. Se le vio con chispa, listo para acercarse al nivel que mostró en el Villarreal. Asistió a Griezmann en el 0-1, en un gol que muestra lo compatibles que pueden llegar a ser ambos pese a compartir características. Dejó su sitio a Jackson en el 76’.
Carrasco: entró por Augusto en el 55’ para darle verticalidad al Atlético y por instantes lo consiguió. Probó con su buen disparo a Sergio antes de hacer el 0-2 en una gran acción personal, tras sentar a dos defensores. Simeone le pide gol y el belga volvió a hacerlo, tras varias jornadas sin marcar.
Jackson: entró en el 76’ en lugar de Vietto. Buscó balones con los que fabricar algo, pero no tuvo suerte ni precisión en el manejo. Sólo aportó detalles del delantero que se espera que sea.
Gámez: ingresó en el 83’ en lugar de Griezmann para dar presión al mediocampo, colocándose por delante de Juanfran.