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ESPANYOL

Raíllo: "En Córdoba me tratan como si fuese alguien"

El central perico, que será titular esta tarde en Eibar, disfruta de su primer año en la máxima categoría. "Hay que aprender de los veteranos".

Actualizado a
Raíllo, en el partido ante el Barcelona.
ALBERT GEAREUTERS

Aunque Córdoba ha tenido a ilustres jugadores de la Liga como el portero Miguel Reina (padre de Pepe Reina), siempre que un paisano logra jugar en la máxima categoría se convierte en motivo de celebración en la provincia. Eso ocurre ahora con Antonio Raíllo, el central perico que el pasado miércoles fue titular en el derbi y lo será también esta tarde en Ipurua. “Están muy contentos con mi trayectoria. Me tratan como si fuera alguien, pero no soy nadie. Están orgullosos de mí”, soslaya el central, tímido, después del entrenamiento del primer equipo en Sant Adrià.

Cuando el jugador empezó de titular en el campeonato, su familia compró entradas para el partido en el Santiago Bernabéu, que tendrá lugar el 31 de enero. También han estado presentes en ambos derbis. Ha llovido desde agosto, pero el cordobés vive una segunda oportunidad. “Estoy muy contento. Empecé jugando los dos primeros partidos pero luego viví la realidad que me toca esta temporada. Cuando Sergio me empezó a darme algo de confianza, lo echaron. Pero ahora Galca también está confiando en mí, porque a la primera baja, ya me ha puesto”, reflexiona.

Raillo era un enfermo del fútbol cuando era niño. Empezó jugando a fútbol sala hasta los 13 años, pero alternaba tres equipos a la vez en las tres modalidades de este deporte: sala, siete y 11. “Jugaba tres partidos cada semana: viernes, sábado y domingo”, comenta. “Como era un jugador que tenía recorrido, me ponía en mediocampo, pero luego llegó un entrenador y dijo: ‘este que es alto, tiene que jugar atrás”. El futbolista soñaba “con jugar en Primera”, pero “nunca me imaginé que saldría de mi casa para conseguir este sueño”. Recuerda algunas anécdotas con cariño, como “cuando disputé las semifinales de un torneo sectorial de fútbol sala. Fue un partido que nunca olvidaré. Llevaba melena de pequeño y, cuando metí un gol, todos en la grada empezaron a llamarme Mendieta”.

Ahora Raillo intenta aprender de la experiencia. “Cuando un veterano te dice algo es porque lo ha vivido. Hay que hacerles siempre caso”. Una filosofía que tiene grabada a fuego, como su debut en un derbi. “Es algo que te inculcan desde el primer día que llegas al Espanyol”. Raillo escuchaba de pequeño las historias de su padre, jugador de fútbol también en varios conjuntos de la provincia como el Zoco o el Guadalcazar. Su hermano también se le da bien este deporte y actualmente juega en Gavà. Manuel (así se llama) es el máximo goleador del equpo con cinco tantos.