Match-ball para Rafa Benítez ante un Agirretxe desatado

Real Madrid - Real Sociedad en directo aquí

No ha habido parón en el Madrid. Mientras Benítez se encastillaba en Liverpool aquí han matado la espera telefoneando a los socios para preguntarles sobre la conveniencia de mantenerle y para sugerirles, de paso, sustitutos. Se trataba de que eligieran entre Zidane y Mourinho, cuyos nombres se pronunciaban convenientemente enmascarados entre un racimo de candidatos imposibles.

No ha habido tampoco desmentido oficial a las informaciones que le sentenciaban. Y los diez goles a un Rayo con nueve no han servido ni de placebo. Demasiado humo para no creer en el fuego. Así de precario llega Benítez al choque de hoy ante la Real, abandonado por el club y por la plantilla y colgado del finísimo hilo de los resultados. El de hoy y los que vienen, todos puntos de partido. Sólo la perfección sostenida le mantendrá, porque imaginando enemigos no encontrará la salvación.

El club, en cualquier caso, no descubrirá mejor estudio demoscópico que el que ofrece el Bernabéu. De salida cumplirá con la costumbre de pitar al técnico y después escuchará al equipo. Sugiere el entorno de Benítez que endurecerá su línea y eso limpia a Isco y quizá también a Kroos, pero no a la BBC, cuyos nueve goles al Rayo se venden al peso.

De la cita se cae Ramos, que no ha dejado huella este curso: once partidos sin él, con diez victorias y un empate. A cambio regresa Varane, que sale de una lesión y no se sabe si del túnel por el que ha transitado. El resto queda en manos de un técnico que defiende sin pruebas que puede con esto. 

A la Real no le va mejor. Destituyó a Moyes y eligió a Eusebio, con el que sólo ha ganado dos partidos de siete y que se ha visto fuera de la Copa, eliminado por Las Palmas. De momento ha retirado de la medicación el pelotazo británico y ha adecuado el juego a la sutileza de la plantilla, pero al borde de la zona de descenso la afición también espera resultados. Se encomendará a un centro del campo madridista, con Illarramendi y Canales (se cayó Granero a última hora), y al acierto de Agirretxe, la mejor noticia de la campaña. Ha metido 12 de los 17 goles del equipo. Un gran solista en un coro manifiestamente mejorable.