El Granada busca delanteros en el mercado de invierno
El ahorro por la salida de Thievy, que rondaría el millón de euros, permitirá ser más agresivos a la hora de pujar por un atacante de nivel.
El Granada quiere reforzar su ataque en el mercado de enero. Los últimos acontecimientos unidos a las dificultades para marcar han desembocado en esta decisión que estaba cantada desde hace semanas. Lo de incorporar a un delantero era algo que ya estaba barajando el director deportivo Juan Carlos Cordero pero la inminente salida de Thievy ya no deja lugar a las dudas y obliga al Granada a posicionarse en el mercado invernal. Pina tiene preparado precisamente el dinero que no va a pagar por Thievy que ya estaba pactado con el Espanyol en el momento que jugara en diez partidos o sumara más de 400 minutos: algo más de un millón de euros. No quiere decir que se lo vaya a gastar todo pero este ahorro le va a permitir ser un poco más ambicioso y más agresivo a la hora de pujar por los goleadores que se pongan a tiro.
La intención de Cordero es al menos fichar un nueve y otro jugador más de ataque que resulte una competencia para subir el nivel de la media punta. La falta de recursos y la escasa confianza que Sandoval tiene en algunos miembros del vestuario de la primera plantilla ha quedado de manifiesto con la aparición de Peñaranda, un joven de 18 años que sin apenas darse cuenta se ha visto con la camiseta de titular durante tres partidos seguidos mientras otros como Edgar, Nico López o el propio Piti han comenzado a ser habituales en la grada.
El Granada sigue manteniendo dificultades para llegar al gol aunque ha mejorado bastante con respecto a temporadas anteriores. Este año ha sumado 15 goles en 14 partidos, a más de uno por jornada, superando en esta clasificación a Levante, Las Palmas, Málaga, Espanyol y Betis, y empatado con otros tres equipos. Aunque se puede decir que está en la media realizadora de los inquilinos de la mitad hacia debajo de la tabla, la dependencia en ataque de Success y El Arabi es preocupante y Cordero pretende que las incorporaciones repartan responsabilidades e incentiven la competencia dentro del grupo.